viernes, 26 de noviembre de 2021

LA OBRA DE Magenta Murillo




ARTES PLÁSTICAS EN TIEMPOS DE

LA COVID – 19


LA OBRA DE

Magenta Murillo


A FULL

Color

Magenta Murillo, nació en La Paz, Bolivia. Es una destacada pintora y artista visual. Estudió en la carrera de Artes de la UMSA, egresando el año 1996, como Licenciada en Arte. También asistió como alumna libre a la Escuela de Artes “Hernando Siles” e hizo un postgrado de crítica de arte en la Universidad “Santo Tomás de Aquino”.

Su obra parte muchas veces de una visión de mujer ante los materiales, los objetos; una visión no femenina sino la percepción de la mujer sobre nuestro mundo y cómo se adecua a los roles que la sociedad determina. Su pesquisa, sin descanso, busca arte y más arte, arte que la sensibiliza. Ella se ajuste y se siente a sus anchas con cualquier material para poder expresar una concepción.

Magenta Murillo asoma su trabajo creativo, representado dentro y fuera de Bolivia. Su producción es la de una artista siempre rociada de argumentos culturales.

Su obra es un laboratorio personal de creación que se manifiesta en instalaciones, videos, fotos, arteobjetos, esculturas en bronce, pinturas, murales, y otros.

Del año 2001 al 2019 es invitada a escribir sobre arte y cultura en los medios de comunicación: La Razón, La Prensa, Revista Datos, El Deber; como también en algunos medios virtuales.

El año 2002 realiza toda la obra artística del Hotel Casa Grande de la Ciudad de La Paz-Bolivia (más de 60 obras pictóricas de diferentes formatos).

El 2005 su obra es invitada a la bienal de arte de Rumania.

2006 realiza gran parte de obra pictórica para el Hotel Europa en la Ciudad de La Paz-Bolivia.

El año 2007 fue seleccionada entre los 10 mejores artistas jóvenes de Bolivia. El 2008 es invitada a Foto Encuentro, Santiago de Chile

2008 y 2009 es seleccionada entre 50 artistas representando a Latinoamérica para la fundación BUGATTI, Italia

Los años 2010-2015, su obra es seleccionada para ARTBASEL en la ciudad de Miami-Estados Unidos; la más grande feria de arte contemporáneo en el continente americano.

Catedrática de la UPSA (Universidad Privada de Santa Cruz) durante 5 años, universidad UNIFRAZ Santa Cruz durante 4 años. El año 2011 trabajó con un grupo de la Nación Ayoreo, en recuperación de iconografía, Santa Cruz de la Sierra-Bolivia.

El año 2013, el Taller de Arte en el marco del Festival Internacional de Diseño (Bienal del Cartel), BICEBE en la ciudad de La Paz-Bolivia, como invitada destacada. El año 2014 presenta su exposición en Brasil, en las ciudades de Curitiva y Joeville.

El año 2015 es invitada por la Oficialia Mayor de Cultura de La Paz, para realizar el mural de gran formato frente al Teleferico Verde Alto Obrajes.

El año 2016 abre su estudio en Vancouver Canada Taller ARTEOBJETO (Alexander Syreet, Gas Town). El año 2016 su obra vuelve a ARTBASEL Miami-Estados Unidos. El año 2016 realiza un taller de arte con los refugiados de Nepal en Vancouver Canada. El año 2016 abre su exposición Art Crow Public en Vancouver Canada (Weekend of art).

El año 2017 Exposicion en el Hotel Los Tajidos, Santa Cruz de la Sierra-Bolivia. El año 2017 su obra vuelve ARTBASEL Miami-Estados Unidos (Feria de Arte Mundial). El año 2018 su obra interviene en la Gala De Angeles de Rosita Hurtado en la ciudad de Miami-Estados Unidos.

El año 2018 Realiza 4 exposiciones: Casa de la Cultura, Edificio La Riviera, Sociales Vip y Le Ecole France. El año 2019 es Contratada como influencer de la marca de pinturas Monopol

El año 2019 exposición en Casa Melchor Pinto, Santa Cruz de la Sierra-Bolivia. El año 2019 DÍAS DE ARTE. el grupo de los 10 artistas más contundentes de Santa Cruz-Bolivia y Chile. El año 2019 lleva su obra a Tel-Aviv Israel. El año 2019 desarrolla su línea comercial de papelería y productos exclusivos by Magenta Murillo.

El año 2020 exposición en Lisboa-Portugal, Galería AGRES. El año 2020 realiza la primera exposición virtual en medio del Covid-19 a través de su plataforma de Facebook en el mes de mayo.

El año 2020 trabaja en la Escuela Isabella Ferdinand de Miami-Estados Unidos, con talleres “on line” para adolescentes y minorías.

Magenta dicta talleres de arte ininterrumpidamente en su estudio ARTEOBJETO (taller nómade), nacional e internacionalmente, desde el año 1998.

En el periodo de 1997 a la fecha, ha realizado más de 150 exhibiciones dentro y fuera de Bolivia, entre personales y conjuntas, en países como Perú, Argentina, Chile, Brasil, Costa Rica, EEUU, Canadá, Alemania, Italia, Rumanía, España, Francia e Israel.



La revista boliviana DATOS, escribe que Magenta Murillo se parece a los colores de su última exposición “Sueños y Ensueños” es algo del reflejo de la evolución de la artista que durante estos años supo conciliar entre formas y colores para mostrarnos cuadros con efervescencia de su propia realidad, lo que probablemente ella considera son sus sueños; el ensueño es la presencia clarividente de ella misma posando, sonriendo y dejando que el mundo tome una brisa para ser conquistado, tome posesión de ella misma considerando la naturaleza inquieta y temida.

Magenta, añade DATOS, se ha ganado un espacio que ella misma se ocupó de ir abriendo y la magistral exposición que nos pone frente a nuestros ojos no es apenas la imaginación de un encantamiento, sino la libertad creadora por recuperar lo perdido de forma quizá más consciente que antes. Magenta Murillo ha salido de la meticulosidad y de los debates abstractos para formar con sus colores y pinceles figuras risibles que se asemejan en algo a cada uno de nosotros.

Esa capacidad, subraya la revista DATOS, de comunicar formas es un regalo que el espectador siente en la inmensidad fraccionada de la ilusión que encarnan los cuadros de su nueva exposición. Inquieta y siempre dispuesta, provocativa la artista conversó con nosotros.

¿Crees que tu arte se ha transformado aunque las expresiones de color las mantienes habitualmente integras?

Sí, mi arte se ha transformado, ha sufrido una reinvención permanente, no rigurosa pero constante por que investigue y me manifesté en todas las formas posibles, foto, instalación, escultura en bronce, etcétera; creo que es por la búsqueda permanente, ahora siento que encontré la punta del ovillo.

¿Por qué el nombre de Sueños y Ensueños o algo similar hay mucho que ofrecer en tu manifestación onírica?

Sueños y Ensueños es aquello que está ahí en un mundo mágico que no lo racionalizo solo se manifiesta y el ensueño que podría jugar con la misma palabra; las cosas que te encantan te sorprenden te adornan la vida, qué sería el existir sin la magia de la ensoñación, eso te da el amor por ejemplo, o un amanecer casi irreal.

Explicamos cómo has pasado el proceso de conexión con esta tu nueva exposición.

Creo que ser artista ya es un reto muy grande con la vida, no creo que el arte involuciona tal vez se paraliza, es solo un reflejo del cotidiano y de la historia de la humanidad un documento vivo de lo que está pasando, yo veo una evolución grande en la mía y me retroalimenta para afirmar que es lo que mejor se hacer y que no voy tan equivocada en lo que decidí hacer. Sin embargo, aún nada está dicho y el laboratorio de encontrar crear y mostrar está abierto, ahora para mí el arte es mi vida en lo privado y en lo público. No pude separarlos y se fundieron.

¿Cuál es la reacción más frecuente del público que ve tu arte?

De sorpresa, de descubrimiento, de preguntarse de cómo dónde porqué (eso me gusta) admiración y de tratar de entender dónde está toda esa locura que explota en un soporte, mucho más con esta obra que está pintada con una base de vino o café; acá (se refiere a Santa Cruz) las reacciones han sido fantásticas porque no se han quedado en “que bella tu obra” sino en muchas interrogantes más. Creo que he tenido la capacidad de atrapar al público más tiempo para que la digiera visualmente y quizá emocionalmente. Fuente: REVISTA DATOS.



La artista plástica comparte el trabajo que debía llevar a una muestra en Santa Cruz e Israel, escribe Miguel Vargas en el periódico LA RAZÓN.

La pandemia sorprendió a todos: a la artista visual Magenta Murillo la agarró con una muestra que debía abrirse el jueves 7 de mayo en el hotel Los Tajibos de Santa Cruz y que después llevaría a Israel, acota.

“Con este cambio en el mundo todo se frustró, aunque no paré de producir. Decidí mudar mi estudio a mi casa y seguí trabajando allí, en mi trinchera, aunque reduciendo algunos formatos con los que habitualmente trabajo. Como siempre, llegué a producir bastante obra”, explica murillo.

Esta muestra, que Magenta comparte en esta página y a través de su perfil de Facebook, bebe de su mundo interior. “No se cómo se organiza ni cómo existe, pero de alguna manera me habita y lo logro exteriorizar. Una pieza no tiene nada que ver con la otra, pero cuando las veo juntas, sin duda alguna pertenecen a un mismo mundo”.

Las piezas se hicieron sobre papel de algodón con tintas naturales, pigmentos, polvo de oro, grafos, acrílicos, café o vino. Sus formatos varían de 40 a 130 cm. Fuente: LA RAZÓN Miguel Vargas.

ESCENAS CULTURA, del periódico EL DEBER de Santa Cruz, permite entrever que Magenta refleja su mundo onírico en su exposición.

Preguntas como ¿cuál es la realidad, la que soñamos o la que percibimos despiertos?, ¿es menos importante la vida que deseamos a la que tenemos?, ¿en qué medida nuestro inconsciente determina nuestras acciones?, esas y otras preguntas son las que la artista plástica se cuestiona frecuentemente y las que ha tratado de plasmar en las 30 obras que desde hoy expondrá en la Casa Municipal de Cultura en la muestra que ha denominado De los sueños y ensueños, señala EL DEBER.

La artista aclara que esa selección de obras que ha realizado no intenta responder a esas interrogantes existenciales, sino que trata de provocar en el público que las vea cierta comunión que permita reflexionar acerca de esos espacios (reales u oníricos) en los que transcurre gran parte de nuestras vidas, agrega EL DEBER.

Los cuadros, hechos en diferentes tamaños, fueron realizados con un papel especial que la artista se hizo traer de Japón. Sobre ellos derramó vino y café, y a partir de las manchas en el papel surgieron los personajes fantásticos y coloridos que viven entremezclados en cada uno de ellos, puntualiza EL DEBER.

“Desde hace tres años que trabajo sobre vino y café, porque me parece que son bebidas muy ligadas a la historia y la comunión entre los hombres. No es que las manchas definen lo que pinto después, sino que es un disparador de ideas, que también me han permitido experimentar con nuevos pigmentos y nuevas técnicas”, explica Murillo.

La artista, que vive hace 16 años en Santa Cruz de la Sierra, reconoce que la exposición que inaugura hoy tiene un significado especial para ella, ya que es la primera vez que presenta sus trabajos en la Casa Municipal de Cultura, pero también porque considera que se encuentra en un momento de su vida artística en el que ha “encontrado la punta del ovillo de su búsqueda estética”, lo que la anima a seguir investigando y experimentando con nuevos elementos y formatos. Fuente EL DEBER.



ESCRIBE Julio Ríos

Magenta, es una coloración similar al fucsia,​ es una denominación para los colores que pueden variar del rosa intenso al púrpura saturado. Su uso está relacionado con la actual teoría del color, en donde se define como un color importante dentro de los círculos cromáticos, cumpliendo el rol tanto de color primario sustractivo, como de secundario aditivo, y reemplaza a la púrpura del modelo tradicional de su lugar como intermedio entre el rojo y el azul.

Ese hermoso color reviste en muchas circunstancias la preciosa cabellera de la artista plástica Magenta Murillo, de quien investigué su destacada y famosa obra. La importancia del color en nuestras vidas es increíblemente transcendental –así las cosas–, el color posee significado no solo en un sentido, si no en varios: expresar estados de ánimo, dar a conocer y señalar nuestra identidad –o identidad corporativa– y además permitirá diferenciar nuestro norte orientado hacia fines imperceptibles, capaces de girar sus ruedas sobre las insospechadas avenidas del arte pictórico más profundo.

Pincel prolijo, inscribe en el lienzo el examen sagaz de su conciencia creadora de artista, donde el corazón suyo está por encima de todo. Magenta con ojos sorprendidos, enormemente abiertos a la realidad es un rostro iluminado por la paz interior que hacen de las imágenes de tan talentosa artista, un motivo muy particular de atracción.

El arte de Magenta, alberga una parte fundamental que es la que reivindica la alegría. Y en esas anda la obra de Murillo, que lo entrevera en cada cuadro, como un arte comprometido y serio con la parte positiva de la vida, un compromiso serio con la felicidad. Mirar sus obras, es precisamente eso, deleitarse en pequeños momentos de felicidad, los que le brindaron sus exposiciones. Detenernos a contemplar un cuadro suyo, es perder todo posible contacto con la desvaída realidad que nos rodea, avasallada por una cruel pandemia a consecuencia de la Covid 19, que ha golpeados mortalmente a la redondez del globo terrestre.

El resultado de cada exposición de Magenta, es una colorida, evocadora y dulce conclusión en la que la artista vibra. Cuando Magenta comienza a alternar con el público por intermedio de su pintura, se percibe una coincidencia con los recibidos elogios de maestros de la plástica, augurándole días de pleno éxito.

La calidad plástica de Magenta va más allá de una primera impresión. Lo que cuenta son los recursos que tiene toda su creación artística y el conocimiento de sus técnicas para inspirarse, junto al esfuerzo y el entusiasmo que ella imprime ante la fuerza creativa y el profesionalismo que la guía. Entonces se revelan impulsos natos como si despertara a una realidad de ideas, dónde se origina la gran obra del arte de Murillo.

Los cuadros, y el contenido de cada uno, convergen hacia sus lienzos, y la plástica hace de cada figura una sublime y abierta imagen llevada a la concepción de la estética y la purificación y exaltación del ser humano. Murillo se ubica en la loma del artista tal como lo contempla en un nuevo día de esperanza.

Cada cuadro entretiene, y es diferente, pero marcando un estilo personal en su creación que se pone de relieve en instalaciones, videos, fotos, arteobjetos, esculturas en bronce, pinturas, murales, y lienzos primorosamente elaborados, donde la artista está perdidamente enamorada del detalle, de la expresión bonita plasmada en el arte “naif”. Magenta mira con los ojos nuevos, lo que nosotros vemos con ojos casados o atufados en la angustia de sobreexistir.

Lo más sobresaliente en esta artista es el dibujo; tiene la habilidad de trazar la concepción que emana de los grandes maestros para llegar a sus trabajos, con el añadido del toque cromático, de mucho color, que puede influir en las miradas más de lo que realmente sobresalen sus obras.

Es la calidad, el resultado de Murillo, calidad del tratamiento de elementos plásticos avasallados de inquietudes siempre en ascenso y de posibilidades claras en el manejo de los recursos que emplea. Por esta razón siempre hay una esperanza de sorpresa cuando se anuncian nuevas exposiciones de Murillo que salen a la luz de la realidad, del ser humano, en un espejismo llenado de expresionismo, gracias a la construcción de imágenes que cierran el círculo de la energía del cosmos.

La inteligencia de Magenta demuestra que hay una presencia continua necesaria y orientada en la psicología para alcanzar la plenitud plástica. Basta el ejemplo de la aceptación popular, y la aprobación profesional, para ubicar a esta pintora entre las dignas exponentes del arte contemporáneo, tarjeta de distinción para aquel inquieto grupo de pintores que ya están consagrados en la propia tierra de su formación.

La impresión que causan sus obras, advierte de una beta abierta por su estilo entre líneas onduladas, densidad y volumen en los colores de Magenta, que encuentra en sus figuras un corte filosófico como un desprendimiento de los ensayos pictóricos.

La artista es una mujer muy hermosa. Carisma y simpatía caracterizan su personalidad representada por un sincera sonrisa contagiosa y abierta a la admiración. La foto que ilustra esta crónica –sentada en el calor del tiempo, el sol y el mar celeste, mientras ella arropada por una elegante y muy escotada transparencia a través de la indumentaria que viste con cuerpo desnudo por debajo–, revela la presencia de una artista, de una mujer realizada y de una viajera incansable.

Magenta es un ícono en el halago de las voces no distantes, y una revelación fuera de nuestras montañas. Su arte es transcripción de su propio espíritu, porque es libertad en su mundo. Hay un sincretismo definido entre las figuras mitad humanas y después imaginación, que en la esencia de la obra terminada cada imagen tala fuerza por su diversificación y su verdad de unidad pictórica.

WRITTEN Julio Ríos

Magenta, a colour similar to fuchsia, is a name for colours that can vary from intense pink to saturated purple. Its use is related to current colour theory, where it is defined as an important colour within the chromatic circles, fulfilling the role of both subtractive primary colour and additive secondary colour, and replaces purple from the traditional model of its place as an intermediate between red and blue.

This beautiful colour is often found in the beautiful hair of the artist Magenta Murillo, whose outstanding and famous work I researched. The importance of colour in our lives is incredibly transcendental –this is how things are–, colour has meaning not only in one sense, but in several: expressing moods, making known and signalling our identity –  or corporate identity– and it will also allow us to differentiate our north oriented towards imperceptible ends, capable of turning its wheels on the unsuspected avenues of the most profound pictorial art.

With a neat brush, he inscribes on the canvas the shrewd examination of his creative conscience as an artist, where his heart is above all else. Magenta with surprised eyes, enormously open to reality is a face illuminated by inner peace that makes the images of such a talented artist, a very particular motive of attraction.

Magenta's art contains a fundamental part which is that which vindicates joy. And this is what Murillo's work is all about, and he interweaves it in each painting as an art that is committed and serious about the positive side of life, a serious commitment to happiness. Looking at his works is precisely that, delighting in small moments of happiness, which his exhibitions gave him. To stop and contemplate one of her paintings is to lose all possible contact with the faded reality that surrounds us, overwhelmed by a cruel pandemic as a result of Covid 19, which has mortally struck the roundness of the globe.

The result of each of Magenta's exhibitions is a colourful, evocative and sweet conclusion in which the artist vibrates. When Magenta begins to alternate with the public through her painting, one can perceive a coincidence with the praise received from masters of the plastic arts, auguring her days of full success.

Magenta's plastic quality goes beyond a first impression. What counts are the resources that all her artistic creation and the knowledge of her techniques have to inspire her, together with the effort and enthusiasm that she imprints before the creative force and the professionalism that guides her. Then natural impulses are revealed as if she were awakening to a reality of ideas, where the great work of Murillo's art originates.

The paintings, and the content of each one, converge towards his canvases, and the plasticity makes each figure a sublime and open image, brought to the conception of aesthetics and the purification and exaltation of the human being. Murillo stands on the artist's hill as he contemplates it on a new day of hope.

Each painting entertains, and is different, but marking a personal style in its creation that is highlighted in installations, videos, photos, arteobjects, bronze sculptures, paintings, murals, and elaborate canvases, where the artist is madly in love with the detail, with the beautiful expression embodied in the "naïf" art. Magenta looks with new eyes, what we see with married eyes, or with eyes that are numb with the anguish of overexistence.

The most outstanding thing in this artist is the drawing; she has the ability to trace the conception that emanates from the great masters to reach her works, with the addition of the chromatic touch, of a lot of colour, which can influence the looks more than what her works really stand out.

It is the quality, the result of Murillo, the quality of the treatment of plastic elements overwhelmed by ever-rising concerns and clear possibilities in the handling of the resources he employs. For this reason there is always a hope of surprise when new exhibitions of Murillo's work are announced, which come to the light of reality, of the human being, in a mirage filled with expressionism, thanks to the construction of images that close the circle of the energy of the cosmos.

Magenta's intelligence demonstrates that there is a necessary and oriented continuous presence in psychology to reach plastic plenitude. The example of popular acceptance, and professional approval, is enough to place this painter among the worthy exponents of contemporary art, a card of distinction for that restless group of painters who are already consecrated in the very land of their training.

The impression made by her works, warns of an open beta by her style between wavy lines, density and volume in the colours of Magenta, who finds in her figures a philosophical cut as a detachment from the pictorial essays.

The artist is a very beautiful woman. Charisma and sympathy characterise her personality represented by a sincere, contagious smile open to admiration. The photo that illustrates this chronicle –sitting in the warmth of the weather, the sun and the azure sea, while she is wrapped in an elegant and very low-cut transparency through the clothes she wears with a naked body underneath– reveals the presence of an artist, of a fulfilled woman and of a tireless traveller.

Magenta is an icon in the praise of non-distant voices, and a revelation outside our mountains. Her art is a transcription of her own spirit, because it is freedom in her world. There is a definite syncretism between the half-human figures and then imagination, that in the essence of the finished work each image draws strength from its diversification and its truth of pictorial unity.



Julio Ríos, escritor y crítico de arte, licenciado en ciencias de la comunicación, es asesor en proyectos de redacción. Escribió el libro DIECIOCHO CRÓNICAS Y UN RELATO, la novela LA TRIADA DE LA MOSCA (Primera Edición 2008 y Segunda Edición 2016), y EL ALTO PARA TODOS (2017). En la fecha trabaja una novela basada en la vida y obra de W.A.Mozart. Estudió en la Universidad Mayor Real y Pontifica de San Francisco Xavier de Sucre y en la Universidad Católica de La Paz. Hizo un diplomado en investigación periodística en la Universidad de La Jolla en San Diego, California.


MAGENTA. UN ANTES UN DESPUÉS. Toda exposición suya es un éxito, un motivo de alegría, una buena noticia para el público, los amigos y fundamentalmente los apasionados al arte, como lo certifica la primera foto.

Magenta es una maestra del muralismo, es una mujer aplomada que trabaja en todo un espacio blanco, al que le dará vida, color a full, hasta que aparezca una magistral creación. Subida entre una suerte de andamios con tarros llenos de pintura, trabaja incesante con la inspiración y la fuerza de la improvisación circunstancial que concluirá con el resultado de una aplaudida y verdadera obra de arte, como apreciamos en la segunda foto.

Alegra, danza Magenta al frente de su mural rociado de color, de imagen que despierta alegría, de pronto reflexión, pero sobre todo de la calidad de un arte que despierta la admiración popular. Pintar, es para ella vivir, y cada segundo, cada minuto, cada hora, cada mañana, cada tarde y cada noche, es la afirmación de un día vivido como si fuera único, como lo demuestra la tercera foto.

Otra exposición, rodeada de amigas personales, entre ellas Ana Domínguez Martilotti, hermana de las artistas pictóricas, Daniela y Sandra. Felices festejan la exposición de Magenta Murillo, como permite entrever la cuarta foto.

Pensativa, con rictus serio y su preciosa cabellera rizada color magenta, color que lleva su nombre, Magenta Murillo, y que es poseedora de un talento sin igual, viva inteligencia y constante creación. Hoy en día esta artista es una de la más importantes de Bolivia y una exponente que se va conociendo meteóricamente en el exterior.


MAGENTA. A BEFORE AND AN AFTER. Every exhibition of hers is a success, a reason for joy, good news for the public, friends and fundamentally for art lovers, as the first photo shows.

Magenta is a master of muralism, she is a woman of aplomb who works on a whole white space, to which she will give life, full colour, until a masterful creation appears. Climbing among a kind of scaffolding with jars full of paint, she works incessantly with the inspiration and the strength of circumstantial improvisation that will conclude with the result of an applauded and true work of art, as we can see in the second photo.

Alegra, Magenta dances in front of her colourful mural, an image that awakens joy, suddenly reflection, but above all the quality of an art that awakens popular admiration. For her, painting is living, and every second, every minute, every hour, every morning, every afternoon and every evening, is the affirmation of a day lived as if it were unique, as the third photo shows.

Another exhibition, surrounded by personal friends, among them Ana Domínguez Martilotti, sister of the pictorial artists, Daniela and Sandra. They are happy to celebrate Magenta Murillo's exhibition, as can be seen in the fourth photo.

Thoughtful, with a serious rictus and her beautiful magenta-coloured curly hair, the colour that bears her name, Magenta Murillo, and who is possessed of an unequalled talent, lively intelligence and constant creation. Today this artist is one of the most important Bolivian artists and an exponent who is becoming known abroad. (JRC)