CINE EN
PANDEMIA
LA COVID – 19
PROTAGONISTAS
Jason Staham / Saffron Burrows
Stephen Campbell Moore / Keeley Hawes
The Bank Job, conocida en español como El robo del siglo o El gran golpe, es una película dirigida por Roger Donaldson y protagonizada por Jason Statham, basada en el robo de un banco en 1971 en la calle Baker Street en el centro de Londres. El dinero, documentos y objetos de valor de las cajas de seguridad nunca fueron recuperados. Los productores alegan que la historia no fue publicitada a causa de una solicitud del gobierno para proteger a un prominente miembro de la Familia Real Británica.
Reparto: Jason Statham, Saffron Burrows, Stephen Campbell Moore, Daniel Mays, James Faulkner, Alki David, Michael Jibson, Richard Lintern, Don Gallagher, David Suchet.
Terry Leather (Jason Statham) es el propietario de un taller de autos y es acosado por prestamistas debido a deudas. Su amiga y exnovia, Martine Love, le ofrece la manera de que sus deudas queden saldadas, para lo cual le facilita datos para realizar el robo a las cajas de seguridad de un banco de la calle Baker Street, en Londres.
Leather reúne a gente conocida de la cárcel, Swain, de profesión fotógrafo, a un actor pornográfico llamado Dave Shilling (Daniel Mays), un mecánico chipriota llamado Bambas (Alki David), y a un elegante hombre "Major" Guy Singer (James Faulkner) para ayudar a ejecutar su plan.
Mientras Leather y Love entran a inspeccionar la bóveda del banco; Shilling posa para las fotografías tomadas por Swain y se encuentran con el gánster Lew Vogel (David Suchet), que mantiene registros de sus sobornos a la policía en esa misma sucursal.
La banda cava un túnel con el fin de llegar a la bóveda del banco. Terry emplea a Eddie Burton (Michael Jibson), un trabajador de su garaje, como vigilante, con un walkie-talkie a sentarse en el techo del edificio de enfrente para informarle de cualquier problema.
Al abrir las cajas Terry encuentra dinero, joyas, documentos y fotos comprometedoras de funcionarios de alto rango, así como de la Familia Real.
Cuando Terry se enfrenta a Martine sobre las fotos (el verdadero motivo de por qué les dio datos para hacer el robo), ella explica su difícil situación. Cuando el robo es descubierto por la policía -tanto los corruptos como los honestos- inician su investigación.
Al igual que Lew Vogel, otro de los perjudicados es Michael X, quien también poseía fotos comprometedoras de la Familia Real con las cuales realizaba chantajes a altos funcionarios.
Vogel identifica a Shilling de su trabajo en películas pornográficas y le tortura para obtener información. Cuando finalmente le dice todo a Vogel, va al garaje donde Terry trabaja y secuestran a Eddie Burton al no encontrar a Terry. Terry, con el fin de liberarse y salvar a Eddie, chantajea al servicio de inteligencia con fotos del ministro de Gobierno, el Señor Drysdale, en los burdeles de la señora Sonia Berna (Sharon Maughan). De esa forma Terry logra nuevas identidades para él y su banda y pasaje de salida del país.
Vogel acuerda reunirse con él en la estación de Paddington en Londres. Durante
este tiempo, Guy y Bambas son también asesinados por desconocidos.
Terry está en el andén esperando a los demás, mientras que Martine encuentra
con Tim Everett (Richard Lintern), su contacto inicial en el MI5. Vogel y sus
cómplices, policías corruptos llegan con Eddie, pero reconocen a los agentes
del MI5 presentes. Al mismo tiempo, el jefe adjunto del MI5 llega (con Lord
Mountbatten), con la entrega de la documentación y los pasaportes que Terry
para negociar, a cambio de las fotos de la persona de la Familia Real.
Terry empieza a atacar a Vogel, y luego pelea con uno de sus matones, golpeando
a los dos. Un segundo guardaespaldas, el policía corrupto detective Nick Barton
(Craig Fairbrass) aparece con un arma, pero Terry se las arregla para evitar
los disparos y golpearlo con un ladrillo
Terry le da el libro a la policía. Vogel y los funcionarios resultan detenidos
finalmente.
En parte la película se basa en hechos históricos. Los productores de la
película afirman que tienen una fuente interior, identificadas en los informes
de prensa como George McIndoe, quien fingió ser un productor ejecutivo.
Es como si todos fuéramos Robin Hood, escribe SAMUEL CASTRO, crítico de cine. “Cada vez que vemos una película de ladrones, sin dudarlo, nos ponemos de parte de los criminales. Deseamos con todas nuestras fuerzas que nada malo les pase, que al final se roben la estatua, o saqueen el templo o abran la caja fuerte. Por eso las películas de ladrones son un subgénero cinematográfico exitoso, que cada año cuenta con uno o dos títulos más en los anaqueles y las carteleras.
Y aunque todos sabemos más
o menos cómo se desarrollan este tipo de cintas, somos incapaces de dejar de verlas
porque siempre esperamos sufrir junto a los protagonistas todas las calamidades
por las que deban pasar, para al final, gozar con el botín. Como quisiéramos
nosotros que terminara nuestra historia.”
Siendo
ese el cometido básico que una película de ladrones debe cumplir: que haya un
plan, que uno le crea a los protagonistas, que se logre conectar con las
emociones del público, que los espectadores quieran que todo les salga
bien, The bank job funciona,
algo que ya merece un reconocimiento en estos tiempos de tramas fallidas. Su
director, el australiano Roger Donaldson, se destaca con este trabajo en una
carrera llena de altibajos (ha hecho cosas horribles como Dante´s peak y Especies, y trabajos tan interesantes
como 13 días) como un
director correcto, que supo imprimirle a la cinta el ritmo justo, sin exagerar
pero conservando siempre el pulso acelerado.
Era necesario ese ritmo para una trama como ésta, que arranca de forma muy sencilla pero que se va complicando —a veces innecesariamente, todo hay que decirlo— conforme se van sumando más y más personajes al barullo.
La historia comienza
con un uso totalmente gratuito de los saltos temporales (es notoria la
influencia que Guy Ritchie ha ejercido sobre este tipo de cine en Inglaterra y
en muchos lugares del mundo, después de Lock, stock and two smoking barrels y Snatch). Probablemente los productores
quisieron sintonizar con las “modas” que les gustan a las audiencias juveniles,
pero esas trampas no funcionan del todo, pues a partir de cierto momento The bank job renuncia al recurso,
y se convierte en una sucesión de hechos que respeta la cronología de lo que se
conoció en Inglaterra a través de los periódicos, pues la película está basada
muy libremente en hechos reales.
Acaba de arrancar la década del 70. El mundo entero vive una revolución sexual y los ricos, por supuesto, tienen mayores libertades. En la primera secuencia vemos a un fotógrafo que toma imágenes de una mujer que está teniendo sexo con otra y con un hombre en un hotel del Caribe.
Más adelante nos enteraremos de que la mujer es la
princesa Margarita, la hermana menor de la reina Isabel, conocida en aquellos
años por su “alegría” y vitalidad. Pero con la realeza británica no se juega, y
cuando el servicio secreto se entera de que las fotos están en posesión de
Michael X, un activista político negro, amigo de personajes como John Lennon,
que las usa como arma para evitar ser encarcelado por los delitos que comete,
idea un plan para conseguir las imágenes.
Y aquí es donde entra el protagonista de la película, Jason Statham (sí, el mismo que se dio a conocer en las películas de Ritchie, el que parece ser el reemplazo contemporáneo de Bruce Willis), personificando a Terry Leather, un pillo de poca monta al que una amante del pasado le ofrece el plan para salir de pobre: asaltar una sucursal del Lloyd’s Bank, cuya alarma va a dejar de funcionar durante un fin de semana, según le ha contado “alguien” de la empresa de seguridad.
Las deudas y los constantes sobornos de policías más el amor que tiene por su familia y sus hijas, hacen que Terry acepte e incorpore al equipo del robo a antiguos compinches de fechorías y a algunos amigos del barrio.
Las cosas se desarrollan con agilidad y el relato del grupo de ladrones nos mantiene atentos, aún cuando en medio comienzan a aparecer fragmentos de otras historias: altos personajes de la política británica aficionados a prácticas sexuales “curiosas” que son fotografiados a escondidas por una proxeneta precavida, un director de cine porno y dueño de prostíbulos que anota cada uno de los sobornos que paga a los policías locales para que lo dejen tranquilo, y una infiltrada del servicio secreto que se acerca a la organización de Michael X para comprobar que no haya más copias de las fotos de la princesa.
Sólo cuando los ladrones tienen éxito
al robar el banco y se llevan las cajillas de seguridad de la bóveda blindada,
todas esas historias se unirán, pues las fotos de la princesa, las de la clase
dirigente inglesa y el libro de contabilidad de los sobornos hacen parte del
botín, así que los pobres ladrones se ven perseguidos por varias clases de
policías, el servicio secreto y matones del hampa local.
Lo que comenzó como la historia
de un robo se convierte en el relato de unos bandidos que al darse cuenta de lo
que tienen entre las manos, logran evadir la trampa del servicio secreto (que
los iba a usar como chivos expiatorios para quedarse con las fotos sin
arriesgar nada) y comienzan a tejer distintas acciones para poder sobrevivir al
fuego cruzado de todos los interesados en que la información que poseen no se
haga pública. No todos lo conseguirán pero eso también es ley en estas cintas:
alguien tiene que morir, preferiblemente si es el personaje gracioso que nos
causaba simpatía.
Tal vez el principal problema de The bank job sea que a pesar de contar con una historia interesante y bien estructurada, de los buenos resultados de un elenco competente en sus papeles y de una fotografía atractiva que consigue imitar el color de muchas películas policíacas de los setenta, no hay un solo frente en el que se atrevan a arriesgar y siempre se quedan en el amague.
Insinúan un fuerte contenido sexual
pero al final los domina el pudor y los protagonistas no pasan de un casto beso
frente a nuestros ojos; insinúan terribles torturas y violencia física pero les
da miedo mostrar la sangre (en eso no se parece a las cintas de Guy Ritchie) y
la única pelea dura menos de un minuto; hasta la corrupción que se había
insinuado como un plato fuerte de la historia al final termina en nada, en que
a algunos malos (no los más importantes) los castigan, a los ladrones los
premian y todos tan contentos. Sólo ciertas frases al final, logran que la
historia de enredos políticos y alta chismografía parezca creíble.
Probablemente si viviéramos en otros tiempos, cuando el cine de acción era capaz de ofrecer ideas interesantes mientras entretenía, esta película no se hubiera destacado tanto. Pero en la actualidad, con esta escasez de contenidos que valgan la pena y tantos domingos sin nada que ver, The bank job nos puede curar, con algo de inteligencia, del aburrimiento y de Eddie Murphy aterrizando en naves espaciales.
The Bank Job, conocida en español como El robo del siglo o El gran golpe, es una película dirigida por Roger Donaldson y protagonizada por Jason Statham, basada en el robo de un banco en 1971 en la calle Baker Street en el centro de Londres. El dinero, documentos y objetos de valor de las cajas de seguridad nunca fueron recuperados.
Los
productores alegan que la historia no fue publicitada a causa de una solicitud
del gobierno para proteger a un prominente miembro de la Familia Real
Británica.
La historia, basad en un hecho histórico y real, cuenta el verídico robo al Banco de Londres en 1971, que nunca fue resuelto.
Al parecer, los ladrones cavaron un tunel hasta la caja de seguridad y se llevaron millones de dólares, pero el robo fue atajado de los periódicos por orden del gobierno, por la posible implicación de algunos miembros de la corona real británica.
Julio Ríos
Saffron Burrows, es un actriz muy hermosa y
sensual. Su rol en la película es cautivante, mas la presencia que ilustra esta
crónica, permite entrever mucha piel. Piel desnuda o cuerpo desnudo a través de
la muy escotada y abierta prenda en todo el torso, dentro de la tendencia
braless. Burrows, viste el atuendo con piel desnuda debajo, vale decir, exenta
de prenda interiores. No usa ninguna camiseta, Tampoco brasier.
La trama de la película, basada en un hecho
real, descubre que la perfección a la que pretende llegar la Scotland Yard, no
es la que el mundo supone. Hay policías corruptos involucrados en atroces
protagonismos. El mundo de la política del Reino Unido, entre lores y sires,
también demuestra debilidades que patológicamente tienden a ser de espíritu menguado.
El film se inicia con tono sexual, mostrando al principal villano acostándose
con mujeres en medio de una pasión desbordante.
El móvil revela a un grupo de ladrones que planea
y ejecuta un golpe maestro: un espectacular atraco a un banco. Además del
dinero y las joyas, forman parte del botín ciertos documentos que permitirían
sacar a la luz un escándalo de corrupción que involucra no sólo a altos
funcionarios del gobierno británico, sino también a un miembro de la familia
real.
Con un
actor como Jason Statham al frente del reparto se esperaba en esta película The
Bank Job, algo al estilo de films como Transporter. A priori no es malo, porque
las películas protagonizadas por este actor son
entretenimientos sin pretensiones, englobadas. Es cine de acción.
Sin duda,
en esta realidad, el film es efectivamente es irreprochable, de ritmo ágil,
entretenida y con una historia interesante, que recupera de una magnífica
manera al modo visual de las películas de los años setenta.
La base
argumental no es muy novedosa para aquellos que hayan visto algún film sobre
planes de atraco (entre los más famosos de los más recientes la trilogía de
Ocean’s protagonizada por George Clooney o The Italian Job, donde también
intervenía el actor. La película se desmarca de esos títulos, había cuenta que
prima más la espectacularidad de las acciones, para llevarnos a los robos al
viejo estilo, cavando túneles para llegar hasta la cámara acorazada. Un aire
retro el estilo del atraco muy acorde con toda la estética del film.
Pero que la
película recuerde a los films clásicos de los años sesenta y setenta de planes
para realizar grandes robos, no sería nada sin los actores. Asoma el total
acierto de todos sus protagonistas, no sólo los secundarios (todos ellos muy
creibles) sino también los principales: Jason Statham le da la suficiente
prestancia a su interpretación del líder del grupo (y sólo tiene una pelea en
el último tercio, con lo que se esfuerza para actuar y no ser sólo el hombre
duro del film, aunque sale victorioso en ambos frentes.
Por su
parte Saffron Burrows se destaca, muy bien y con talento como la mujer bella de
la banda y antigua amante del protagonista. David Suchet quien interpreta a un
muy auténtico villano, desarrolla todo su potencial en la última parte de la
película.
Una vez espectada
la película, se entrevera que está dirigida más hacia el público adulto que al
juvenil. En resúmen lo que se puede decir de The Bank Job es que es toda una
sorpresa cinematográfica a descubrir y una muestra más de que en ocasiones las
películas de calidad no tienen por qué ser las grandes superproducciones, sino
que en ocasiones son los films más pequeños y modestos, pero con mejores
resultados.
La historia
(entretenida, ágil, interesante y muy bien contada) y los actores (dando todo
lo que se pide de ellos para los papeles que interpretan).
By Julio Ríos
SAFFRON IS NAKED BODY THROUGH THE VERY LOW-CUT DRESS WITH BARE SKIN UNDERNEATH
Saffron Burrows is a very beautiful and sensual
actress. Her role in the film is captivating, but the presence that illustrates
this chronicle, allows to glimpse a lot of skin. Naked skin or naked body
through the very low-cut and open garment all over the torso, within the
braless trend. Burrows, wears the outfit with bare skin underneath, that is to
say, without undergarments. She does not wear any T-shirt or bra.
The plot of the film, based on a real event,
discovers that the perfection to which Scotland Yard pretends to reach, is not
what the world assumes. There are corrupt policemen involved in atrocious
protagonisms. The world of politics in the United Kingdom, among lords and
sires, also shows weaknesses that pathologically tend to be of a waning spirit.
The film opens with a sexual tone, showing the main villain sleeping with women
in the midst of unbridled passion.
The motive reveals a group of thieves planning and
executing a masterstroke: a spectacular bank robbery. In addition to the money
and jewels, the loot includes documents that would expose a corruption scandal
involving not only high-ranking British government officials, but also a member
of the royal family.
With an actor like Jason Statham at the head of the
cast, it was expected in this film The Bank Job, something in the style of
films like Transporter. A priori it is not bad, because the films starring this
actor are unpretentious entertainment, encompassed. It is action cinema.
Undoubtedly, in this reality, the film is indeed
irreproachable, of agile rhythm, entertaining and with an interesting story,
which recovers in a magnificent way the visual mode of the films of the
seventies.
The plot is not very new for those who have seen
any film about heist plans (among the most famous of the most recent ones, the
Ocean's trilogy starring George Clooney or The Italian Job, where the actor
also played a role). The film is different from those titles, with more
emphasis on the spectacular nature of the actions, to take us to the old-style
robberies, digging tunnels to reach the vault. A retro air the style of the
heist very consistent with the whole aesthetics of the film.
But that the film is reminiscent of the classic
films of the sixties and seventies of grand theft plans, would be nothing
without the actors. The total success of all its protagonists is evident, not
only the secondary ones (all of them very credible) but also the main ones:
Jason Statham gives enough presence to his interpretation of the leader of the
group (and he only has a fight in the last third, so he makes an effort to act
and not just be the tough guy of the film, although he comes out victorious on
both fronts.
For her part Saffron Burrows stands out, very well
and with talent as the beautiful woman of the gang and former lover of the
protagonist. David Suchet, who plays a very authentic villain, develops his
full potential in the last part of the film.
Once you watch the film, you can see that it is
aimed more at an adult audience than a young one. In short, what can be said
about The Bank Job is that it is a cinematic surprise to be discovered and
another proof that sometimes quality films do not have to be big blockbusters,
but sometimes they are smaller and more modest films, but with better results.
The story (entertaining, agile, interesting and very well told) and the actors (giving everything that is asked of them for the roles they play).
The Bank Job | ||
---|---|---|
Título | El robo del siglo El gran golpe | |
Ficha técnica | ||
Dirección | ||
Producción | Chuck Roven Steve Chasman | |
Guion | Dick Clement Ian La Frenais | |
Música | J. Peter Robinson | |
Fotografía | Michael Coulter | |
Montaje | John Gilbert | |
Protagonistas | Jason Statham Saffron Burrows Richard Lintern Stephen Campbell Moore James Faulkner Daniel Mays | |
Ver todos los créditos (IMDb) | ||
Datos y cifras | ||
País | Reino Unido Estados Unidos | |
Año | 29 de febrero de 2008 | |
Género | Cine de atracos, suspenso, drama y crímenes | |
Duración | 111 minutos | |
Idioma(s) | inglés | |
Compañías | ||
Productora | Relativity Media | |
Distribución | Lionsgate | |
Estudio | Mosaic Media Group Omnilab Media Relativity Media | |
Presupuesto | US$20 million1 | |
Recaudación | US$64,068,1592 | |
Ficha en IMDb Ficha en FilmAffinity | ||
Julio Ríos, escritor y crítico de arte, en la actualidad se desempeña como consultor, asesor de seguros y asesor en proyectos de redacción. Ha escrito los libros DIECIOCHO CRÓNICAS Y UN RELATO, la novela LA TRIADA DE LA MOSCA (Primera Edición 2008 y Segunda Edición 2016), y EL ALTO PARA TODOS (2017).
The Bank Job, conocida en español como El robo del siglo o El gran golpe, es una película dirigida por Roger Donaldson y protagonizada por Jason Statham, basada en el robo de un banco en 1971 en la calle Baker Street en el centro de Londres. El dinero, documentos y objetos de valor de las cajas de seguridad nunca fueron recuperados.