viernes, 7 de mayo de 2021

LA OBRA DE Mary Morales

 

ARTISTAS PLÁSTICOS EN TIEMPOS DE

LA COVID – 19 

 LA OBRA DE

Mary Morales


MIRANDO HONDURAS CON

PINTURAS ENÉRGICAS  


 LA REALIDAD CONVERTIDA

EN MAGIA

 

La talentosa pintora hondureña Mary Morales, a su corta edad ha demostrado una sensibilidad estética y una gran habilidad para la imagen que ha recibido aplausos unánimes de los críticos y artistas del país. Morales, quien aprendió a pintar por su cuenta y por pura curiosidad logra capturar la realidad y convertirla en algo mágico.

“Empecé a pintar por casualidad, a los 16 años”, relata a Honduras Tips. Un día, casi por accidente, se encontró en una tienda de pintura en la que los óleos captaron su atención. Su aroma y su textura la llevaron a hacer el intento de pintar y ese impulso se convirtió en una obsesión que aún prevalece.

El no haber tenido una educación formal en la pintura le ha permitido explorar su estilo con total libertad. Desde retratos de sus seres queridos en los que logra plasmar tanto su físico y carácter; así como obras que se acercan más al impresionismo o la abstracción, Mary continúa encontrando su voz entre formas y colores libres.

“Me gusta el movimiento, por eso procuro que todo lo que pinto sea diferente a todo lo que haya hecho antes, por eso digo que un Mary Morales es irrepetible”, explicó.

En su estudio se permite explorar con total libertad lo que su impulso artístico le dicta. Sus primeras series de pinturas son imágenes fuertes que causan conmoción a quienes la ven. Su serie “Tensiones Cromáticas” está llena de conflicto, retratar las imágenes de una protesta o de migración no es tarea fácil. Sin embargo, esta gran labor cosechó sus frutos, fue aplaudida por críticos de arte y artistas nacionales de gran trayectoria por su madurez y habilidad.

Más allá del buen recibimiento, estas obras logran conmover a cualquiera que las ve e invitar a la reflexión sobre nuestro entorno.

“Creo que es el gran papel del arte, levantar conciencias, en lo político, en lo humano, en la belleza, en lo esencial” asegura la artista a Honduras Tips.






“Las obras de arte más que dar respuestas deben dar preguntas, ser un objeto que podamos ver por mucho tiempo y no aburrirnos, como pintora y espectadora busco eso”.

Pintar temas tan complejos la dejó muy agotada, así que durante este año se ha dedicado a explorar las formas que encuentra en su propio hogar y abordar temas más positivos. “Estoy trabajando en mi jardín, abstrayendo los colores y haciéndolos pintura.”

Esta visión sobre su arte así como la sensibilidad al poder de las imágenes se ve reflejada incluso en los pintores a quien ella admira. “He llorado viendo obras de Rembrandt, Rubens y William Turner por el uso magistral del color. Como logran tocar las fibras más sensibles con los detalles”.

Su amor por la pintura y la búsqueda por lograr que sus obras se vuelvan un placer visual para el espectador está lejos de terminar. La artista hondureña dedica muchas horas al día a explorar sus nuevas ideas, que aparecen de manera orgánica cada día.

Mary Morales ha recibido grandes reconocimientos tanto de la crítica especializada, de sus colegas artistas y de los espectadores. Su carrera como pintora recién comienza pero ya se perfila como una de las mayores exponentes del arte hondureño. Todo esto gracias a su brillante talento y profunda dedicación a lo que tanto ama.

“El arte es uno de los factores más determinantes en la cultura de una sociedad. Los pintores, músicos, poetas, arquitectos forjan nuestra identidad y orgullo”.

A ellos, los futuros artistas de nuestro país, los invita a no abandonar su pasión y a seguir aprendiendo con los recursos que tengan disponibles. Así como a convertir esas ganas de crear en una obsesión.

Mientras, Mary Morales continúa aprendiendo, explorando nuevos límites y creando sin limitarse de ninguna manera. El éxito que ha conseguido, a pesar de las dificultades, es una prueba de que en nuestro país hay un espacio para el arte. Es nuestro deber hacerlo más grande.




Julio Ríos

Mary Flores es una joven talentosa, originaria del municipio de Quimistan, en el Departamento de Santa Barbara. Nunca ha pisado una escuela de arte, pero sus lienzos fascinan y coaptan el alma de quienes observan su arte.

Mary solo tiene 21 años, inicio en el mundo del arte desde los 7 años, con crayones y papel. En los últimos meses los círculos de arte del país se han visto sorprendidos por el nivel de esta joven y dulce pelirroja.

Sus pinturas se han vuelto virales, ella siente que tiene una necesidad de expresar lo que sucede en el país a través del arte. Dejar de soñar no es una opción, asegura la joven. Parte de su filosofía de vida es ver el arte como una práctica de la libertad.

La pintura es famosa porque relátala la crisis que vivió el país, ella sentía la necesidad de canalizarlo a través de una pintura majestuosa. Imposible no quedarse cautivado al ver las pinturas de Mary.

Mary Morales es sin vacilación, una artista iluminada. Dios le mandó al alma, talento, una espátula, un pincel, un caballete. Pintó desde niña, y hoy en lo mejor de su juventud, destaca, conmueve embelesa con sus cuadros en las exposiciones.

Y es autodidacta. Nuca puso un pie en una escuela de arte. Ella se instruyó por sí misma. Jamás ha recibido ninguna enseñanza, más la que le dio la divinidad. Así que a pintar no le ha enseñado nadie, lo que se dice tomar los óleos y el pincel y demás. Y aunque la técnica tiene su importancia, fue fácil aprenderla. Sólo tuvo paciencia, práctica, investigación y también libros.

Pintar para Mary, es ir a beber a la fuente de la sabiduría, donde empezó todo. Sólo así es posible construir algo propio. Tener una base sólida para desarrollar su estilo, se produjo al enamorarse de la realidad física, social y urbana de su Honduras, su país.

En Arte, hay muchas cosas que no se pueden enseñar, que hay que aprenderlas por sí mismo. No queda otro camino que trabajar en soledad. Pero ahí nace la oportunidad de compartir lo que se trabajó en soledad. Por eso dicen de Bellas Artes que hay que estudiar la carrera y luego olvidar todo lo que se ha aprendido. Mary aprendió sola con la fuerza de su inspiración.

Picasso lo tuvo que hacer así. Desaprender lo aprendido de niño. El hecho de que su padre fuera profesor de dibujo, le condicionó de alguna manera. Picasso, era un niño que tenía las habilidades técnicas propias de un adulto. Por eso ya en su madurez, decía que le costó muchos años aprender a pintar como un niño.

Hoy Mary Morales es una joven pintora hondureña que a su corta edad llamó la atención de la crítica por sus poderosas obras donde evoca la realidad hondureña. Originaria de San Pedro Sula, comenzó a pintar a los 16 años por una simple curiosidad al arte. Sin embargo, nunca se imaginó que lo que comenzaría como una mera curiosidad, acabaría siendo su pasión.

Mary es casi una niña, aunque alcanzó este año 2021 en plena pandemia a consecuencia de la Covid, la mayoría de edad, entrevera esa belleza de la juventud, cual cuerpo desnudo que vino al mundo para vestirlo con su dones. La observamos tomar sus instrumentos, y nos sorprendemos el momento que entra en la acción. En la foto, muy bonita, luce una prenda a través de un detalle muy escotado que permite entrever su atuendo que lo usa con piel desnuda debajo.

¡Pero eso no es todo! ya que grandes artistas como Armando Lara han elogiado la madurez de sus pinturas y lo mucho que estas transmiten durante su exposición en el Festival Internacional de Poesía Los Confines.

By Julio Ríos

ARTIST TO WHOM THE DIVINITY ILLUMINATED MARY

Mary Flores is a talented young woman, originally from the municipality of Quimistan, in the Department of Santa Barbara. She has never been to art school, but her canvases fascinate and capture the soul of those who observe her art.

Mary is only 21 years old, she started in the art world since she was 7 years old, with crayons and paper. In recent months the art circles of the country have been surprised by the level of this young and sweet redhead.

Her paintings have gone viral, she feels she has a need to express what is happening in the country through art. To stop dreaming is not an option, she assures. Part of her philosophy of life is to see art as a practice of freedom.

The painting is famous because it tells the crisis that the country lived, she felt the need to channel it through a majestic painting. It is impossible not to be captivated by Mary's paintings.

Mary Morales is without hesitation, an enlightened artist. God sent her soul, talent, a palette knife, a brush, an easel. She has been painting since she was a child, and today, at the peak of her youth, she stands out, she moves, she captivates with her paintings in exhibitions.

And she is self-taught. She never set foot in an art school. She taught herself. She has never received any teaching other than that given to her by divinity. So no one has taught her how to paint, what is said to take the oils and the brush and so on. And although the technique has its importance, it was easy to learn it. She just had patience, practice, research and also books.

To paint for Mary, is to go to drink at the source of wisdom, where it all began. Only in this way is it possible to build something of her own. Having a solid base to develop her style came from falling in love with the physical, social and urban reality of her Honduras, her country.

In Art, there are many things that cannot be taught, that you have to learn by yourself. There is no other way but to work alone. But that is where the opportunity to share what was worked on alone is born. That is why they say about Fine Arts that you have to study the career and then forget everything you have learned. Mary learned alone with the strength of her inspiration.

Picasso had to do it that way. Unlearn what he learned as a child. The fact that his father was a drawing teacher, conditioned him in some way. Picasso was a child who had the technical skills of an adult. That is why, in his maturity, he said that it took him many years to learn to paint like a child.

Today Mary Morales is a young Honduran painter who at her young age caught the attention of critics for her powerful works where she evokes the Honduran reality. Originally from San Pedro Sula, she began painting at the age of 16 out of a simple curiosity for art. However, she never imagined that what began as a mere curiosity would end up being her passion.

Mary is almost a child, although she reached the age of majority this year 2021 in the midst of the Covid pandemic, she has the beauty of youth, like a naked body that came into the world to dress it with her gifts. We watch her take her instruments, and we are surprised the moment she enters into action. In the photo, very beautiful, she shows off a garment through a very low-cut detail that allows a glimpse of her attire, which she wears with bare skin underneath.

But that's not all! Great artists like Armando Lara have praised the maturity of her paintings and how much they transmit during her exhibition at the International Poetry Festival Los Confines.















Julio Ríos, escritor y crítico de arte, en la actualidad se desempeña como consultor y asesor en proyectos de redacción. Ha escrito los libros DIECIOCHO CRÓNICAS Y UN RELATO, (1986), la novela LA TRIADA DE LA MOSCA (Primera Edición 2008 y Segunda Edición 2016), EL ALTO PARA TODOS (2017), LA GENERACIÓN NINI en co-autoría con Alberto Liendo Romero (2023), UNA HISTORIA PARA CONTAR (2024).


Mary Morales, pintora hondureña