EL PINCEL DE LOS ARTISTAS
EN
PANDEMIA
LA
SENSUALIDAD PICTORICA DE
SANDRA
DOMÍNGUEZ MARTILIOTTI
BRALESS
NAIF
PAMELA EN EL LIENZO DE SANDRA
El arte naif o naïf (del francés naïf, 'ingenuo'), Sandra Domínguez Martiliotti, lo aplica a esta corriente artística caracterizada por la ingenuidad y espontaneidad.
El autodidactismo de la artista (aunque tuvo estudios de artes
plásticas), asoma los colores brillantes y contrastados y su interpretación
libre de la perspectiva o incluso la ausencia de ella, la llevó a
extraordinarias creacionoes.
El concepto naíf, de Domínguez, alude no solo a cierto estilo, aplicado en el arte, sino que lo formaliza en una graciosa falta de conocimientos técnicos y teóricos.
En algunos casos suele faltar un sistema de perspectiva o un punto de
fuga, así como un ajustado criterio de las proporciones o un elaborado trabajo
cromático, por lo que podríamos decir que Sandra pinta lo que ella desea o le
parecía más adecuado sin atenerse a ninguna norma.
En este sentido lo naíf de Domínguez, puede estar dado por dos motivos distintos, aunque no excluyentes: en primer lugar, una ingenuidad (que ronda el éxito respecto a las técnicas y teorías para realizar obras de arte) y, en segundo lugar, una búsqueda (consciente o no) de formas de expresión que evocan rostros, cuerpos, en su mayoría de mujeres.
En el primer caso, la sencillez aparente es un elaborado esfuerzo de sus evocaciones; en el segundo, para que su naíf sea auténtico, la intención prístina es precisamente expresar formalmente lo que evoque a una circunstancia supuestamente entornos corporales y caras.
Generalmente, esta inocencia de tendencia infantil se intensificaría como una sintetización de los objetos componentes de la realidad, a partir de una intuición no minuciosa y primaria.
Aunque el genuino naíf por definición no puede tener motivos predeterminados, suelen darse (debido al ambiente cultural en que surge) temáticas relacionadas con la vida cotidiana, la vida familiar, las costumbres, las tradiciones y la natural circunstancia de un personaje creado, representado siempre con la gran imaginación y vivacidad de Sandra.
Sandra Domínguez Martilotti, nació el 12 de julio
de 1962 en Montevideo, Uruguay, bajo el signo de Cáncer, astronómicamente la
constelación del cangrejo y la constelación de la Hidra que están relacionadas
con uno de los doce trabajos del Hércules, a quien recompensó por
sus esfuerzos esta diosa y formó las constelaciones del Cangrejo y la Hidra en
el cielo.
Cáncer, cuarto signo del Zodíaco,
cardinal, y primero del elemento Agua, representa lo femenino, lo fecundo y
está regido por las emociones de la Luna. Es el signo del hogar, de las raíces,
la madre. Sus nativos poseen una gran sensibilidad emocional y una profunda fe.
Son por naturaleza talentosos, soñadores, artistas y sentimentales. La
sensibilidad de un cáncer es insospechada y muy profunda. Nacieron para
triunfar.
Sandra posee la doble
nacionalidad uruguaya, boliviana. Desde muy pequeña, habida cuenta del exilio
de su Señor Padre, que en épocas de dictadura en el Uruguay, tuvo que exiliarse
en Tarija, Bolivia. Para tomar lo bueno de la circunstancia es que ese exilio
fue nada más y nada menos que en la Chura Tarija.
Pero Sandra para llegar a Tarija,
desde Montevideo tuvo que atravesar por un ritual que la topografía de su
barrio imponía: por las ironías de la vida habitaba con su familia en la calle
Cochabamba del Barrio Flor de Maroñas, cerca del barrio Unión (8 de Octubre), continuación
de la avenida 18 de julio, cerca de la cancha del club Danubio “el club de
Sandra”, desde una casa que a todo pulmón la construyeron su padres. De allí
salió la familia rumbo a Bolivia, dejando en el recuerdo al gran equipo de
fútbol en el que jugaron Piñeira y Caranni.
Su domicilio perpetuo, aunque
estuvo ausente por años debido a su actividad diplomática, fue siempre Tarija,
donde hoy reside con sus tres grandes amores, sus hijos Matías, Lucía y
Florencia.
Sandra hizo de todo en su vida.
Fue secretaria ejecutiva en la Paz de la Fábrica de Sombreros Charcas Glorieta,
trabajó luego en la banca, en la Prefectura de Tarija en la jefatura del área
de turismo; después en Servicios Eléctricos de Tarija S.A.
Inició su carrera diplomática en la Embajada de Bolivia en Montevideo, Uruguay, acompañando al recordado embajador Jorge Siles Salinas (época de la primera presidencia de Julio María Sanguinetti).
Más adelante fue secretaria general de la Embajada de Bolivia y
Representación permanente de Bolivia ante la ALADI en Montevideo. Años después
participó de la misión permanente de Bolivia ante la O.E.A en Washington D.C.,
concluyendo en el CONSULADO GENERAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA EN TARIJA,
como Asistente Consular y Encargada de la elaboración DNI,
Opciones de Nacionalidad, Pasaportes, Venias de Viaje, Legalizaciones, Valija
diplomática.
A nivel académico y técnico,
Sandra estudió Secretariado Ejecutivo en el Instituto INSEJ de Tarija. Es
Bachiller en Humanidades del Colegio San Bernardo de Tarija. Cursó el Primer y
Segundo Semestre en la Facultad de Ciencias Jurídicas, en la Carrera
de Derecho en la Universidad Autónoma Juan Misael Caracho de Tarija.
En relación al arte pictórico, de la que es una importante representante del arte plástico en Bolivia, estudió en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de la República Oriental del Uruguay en Montevideo y otros estudios, gracias también a su versatilidad en todo terreno.
BRALESS NAIF
La vida de la talentosa artista
plástico Sandra Domínguez Martiliotti, asoma como principal actividad diaria la
de pintar, y como artista ya está consagrada gracias a su estilo y su incursión
en la corriente “naif”.
Hoy, Sandra me ha permitido
titular esta crónica con el nombre de BRALESS NAIF, que es una tendencia de la
moda de vestir trajes sastre, vestido, blusas y otras prendas, usando piel
desnuda debajo. Pamela Anderson, artista y modelo gano su preferencia y la
pinto en su lienzo, identificándola con este movimiento que ha ganado las calles
de Nueva York, París, Londres, Río de Janeiro, Buenos Aires.
El “naif” todo lo puede y ahora aparece la artista
Pamela Anderson en una tendencia de la moda que hoy la conoce como BRALESS, que
significa de manera sucinta y clara: vestir trajes sastre, blusas, vestidos con
piel desnuda debajo. Ha ganado las calles de Estados Unidos, Inglaterra,
Brasil, Argentina, principalmente los lugares más conocidos en Nueva York,
Londres, Río de Janeiro, Buenos Aires. Pero también un estilo que ha llenado
las portadas de Instagram, Facebook y Twitter. Junto al barbijo, quieren las
mujeres artistas y toda usuaria de las redes sociales en esta referida
tendencia.
Podría explicarse que fueron las artistas y modelos
internacionales, Kate Moss, Emily Ratajkowsi, Gal Gador, Kim Kardashian, entre
otras, las que han ganado la preferencia de revistas especializadas como VOGE,
MIA, EL CLARIN, COSAS, CARAS y diferentes medios de comunicación.
Sandra, con su obra, mira con ojos nuevos, lo que
el resto de la gente observa con vista cansada y atufada por la sobrevivencia
de existir. Ella está perdidamente enamorada de los detalles que imponen sus
personajes que ganan el lienzo y se vuelven cuadros y todos nos embelesamos con
ellos, merced a la temática y el estilo “naif”, tan avasallador, tan
penetrante, por el “carisma espontáneo” y la posibilidad de un comercio de
menudeo.
Pero sobre todo, encima de todo,
corolario de cuanto significa la estirpe Martilotti, iniciación y exaltación
como artista esta su MADRE, quien dejó la tierra prematuramente y fue llamada a
habitar en el cielo junto a Dios. Se llamaba Irma Martilotti León, gran
mujer uruguaya que ha dejado a su familia una herencia invalorable de dignidad
profesional. Sus hijas han recogido como legado la pasión por el arte. Un arte
iniciado por Irma en la ciudad de Montevideo, su tierra natal, donde su
formación intelectual, humanista, habilidad en la pintura y otros artes, caló
en el alma de sus hijos Ana, Sandra, Eduardo y Daniela Domínguez Martilotti.
Sandra es una mujer poseedora de una extraordinaria sensibilidad, sentimiento, talento, romanticismo, perseverancia y sacrificio. Rostro bien parecido, propio de una mujer hermosa, permite hablar con sus ojos profundos, verdes de menta, diáfanos y alegres, junto a una bellísima sonrisa contagiosa que le da un ícono de alegría y un espíritu amoroso y carismático.
The life of the talented plastic artist Sandra
Domínguez Martiliotti's main daily activity is painting, and as an artist she
is already consecrated thanks to her style and her incursion in the
"naif" trend.
Today, Sandra has allowed me to title this
chronicle with the name of BRALESS NAIF, which is a fashion trend of wearing
tailored suits, dresses, blouses and other garments, using naked skin
underneath.Pamela Anderson, artist and model won her preference and painted her
on her canvas, identifying her with this movement that has won the streets of
New York, Paris, London, Rio de Janeiro, Buenos Aires. Pamela appears with a
very low-cut dress without underwear. She does not wear an undershirt, nor a
top. She does not wear a bra. She genuinely represents the Braless trend.
The "naif" can do anything and now the
artist Pamela Anderson appears in a fashion trend that today is known as
BRALESS, which means succinctly and clearly: wearing tailored suits, blouses,
dresses with bare skin underneath. It has won the streets of the United States,
England, Brazil, Argentina, mainly the most famous places in New York, London,
Rio de Janeiro, Buenos Aires. But also a style that has filled the covers of
Instagram, Facebook and Twitter. Along with the chinstrap, want women artists
and every user of social networks in this referred trend.
It could be explained that it was the international
artists and models, Kate Moss, Emily Ratajkowsi, Gal Gador, Kim Kardashian,
among others, who have won the preference of specialized magazines such as
VOGE, MIA, EL CLARIN, COSAS, CARAS and different media.
Sandra, with her work, looks with new eyes, what
the rest of the people observe with tired eyes and stunned by the survival of
existing. She is madly in love with the details that impose their characters
that win the canvas and become paintings and we all become enraptured with
them, thanks to the theme and the "naive" style, so overwhelming, so
penetrating, by the "spontaneous charisma" and the possibility of a
retail trade.
But above all, above all, corollary of all that the
Martilotti lineage means, initiation and exaltation as an artist is his MOTHER,
who left the earth prematurely and was called to dwell in heaven with God. Her
name was Irma Martilotti León, a great Uruguayan woman who has left her family
an invaluable inheritance of professional dignity. Her daughters have taken her
passion for art as their legacy. An art initiated by Irma in the city of
Montevideo, her homeland, where her intellectual and humanistic training, skill
in painting and other arts, permeated the souls of her children Ana, Sandra,
Eduardo and Daniela Domínguez Martilotti.
Sandra is a woman of extraordinary sensitivity, feeling, talent, romanticism, perseverance and sacrifice. Her good-looking face, typical of a beautiful woman, allows her to speak with her deep, mint-green, diaphanous and cheerful eyes, together with a beautiful contagious smile that gives her an icon of joy and a loving and charismatic spirit.
Pamela Denise Anderson (Ladysmith, Columbia Británica, nacida el 1 de julio de 1967) es una actriz y modelo de glamour canadiense, estadounidense. Ha participado en películas, comerciales, comedias de situación y programas de telerrealidad. A lo largo de su carrera ha posado en varias ocasiones para la revista Playboy.