“Patria o muerte”: REIREMOS
POR JULIO RÍOS CALDERÓN
In memoriam Alfonso Prudencio Claure (Paulovich)
Página Siete, domingo 13 de diciembre de 2020
El título de mi crónica, pertenece a una presentación humorística protagonizada por la gran comunicadora y miembro del elenco del programa CONFIDENCIAS de Radio Panamericana. En esta frase me inspiré para conmemorar el “día mundial de la alegría". Se celebra todos los años el 13 de noviembre con el propósito de hacer un llamamiento para ser felices y contribuir a la felicidad de todas las personas en nuestro alrededor.
Hoy el Arzobispo de La Paz, Monseñor Pecy Galván fue invitado por los padres sacerdotes de la Orden de las Carmelitas Descalzas (OCD), a celebrar la misa dominical y realzar la liturgia ponderando el día de la alegría y realizar el sacramento de la Confirmación a un grupo de jóvenes: hombres y mujeres. El prelado destacó las primeras letras el abecedario, invitando a exaltar la Alegría, la bondad y la creatividad. Todos tenemos problemas: de salud, económicos, de amor, pero no existe problema que no tenga solución. Todo tiene solución menos la muerte.
La bondad se define como una actitud positiva hacia los demás, y hacer el bien aquellas personas que nos rodean. Las personas bondadosas ven en cada persona todo lo bueno que pueden aportar, y realizan actos con la finalidad de agradarlos y hacerlos felices.
Por ser hoy Día de la alegría, me escribe mi Padre, “seguiré muy alegre sin ver los espacios de noticias en los canales televisivos nacionales, o sea que me apartaré de noticias dolorosas, de hechos que provocan llanto y desesperación a causa de asesinatos y accidentes provocados por borrachos noticiosos en canales nacionales de televisión. NO ES EL DIA DEL DOLOR, DEL LLANTO Y LA DESESPERACIÓN. Dios quiera que mañana lunes, sea Día del bienestar encuadrado en el optimismo.”
Hubo a lo largo del vivir boliviano escritores de chispa, autores de unas cuantas páginas hilarantes. Han sido pocos. Han abundado más los que han hecho chistes, bromas pesadas, chirigotas malignas, o han acudido a la maledicencia que h que hurga en la vida privada de los demás.
Hoy recuerdo a mi amigo y colega, Alfonso Prudencio Claure PAULOVICH, cuyo humorismo estuvo desprovisto de mordacidad aun cuando frecuentemente ha tenido que vérselas con muchos pavorreales, con muchos babiecas, con muchos “levudos”, con muchos simuladores y demagogos; es decir, con persnajes que no son de su devoción ni mucho menos.
La misión de hacer humorismo (esto es bien sabido) no es muy fácil; especialmente en un país de gente seria y solemne como el nuestro, donde abundan las caras largas y las jetas caídas. “Paulovich lo hizo con bastante trabajo y fue repitiendo la hazaña día tras día, desde octubre de 1958 hasta casi su fallecimiento en 2018 y con mucho éxito porque no recibió “ni una sola paliza”, ni fue detenido, ni confinado a campos de concentración, que existieron, ni exilado a los países vecinos.
Gran personaje de la humanidad, sabio y apóstol de la no violencia fue Mahatma Gandhi. Su humorismo, lógica y retórica se puso de relieve en circunstancia cuando estudiaba Derecho en Londres. Allí un profesor de apellido Peters le tenía mala voluntad, pero el alumno Gandhi nunca bajó la cabeza y eran muy comunes sus encuentros.
Un día Peters estaba almorzando en el comedor de la universidad y él venía con su bandeja y se sentó a su lado. El profesor, muy altanero, le dice: "¡Estudiante Gandhi, Ud. no entiende! Un puerco y un pájaro no se sientan a comer juntos". A lo que Gandhi le contestó: "Esté usted tranquilo, profesor, yo me voy volando", y se cambió de mesa. El profesor Peters se puso verde de rabia, porque entendió que el estudiante le había llamado puerco, decidió vengarse con el próximo examen.
Pero el alumno Gandhi respondió con brillantez a todas las preguntas del examen. Entonces el profesor le hizo la siguiente interpelación: "Gandhi, si Ud. va caminando por la calle y se encuentra con dos bolsas y dentro de ellas están la sabiduría y mucho dinero, ¿cuál de las dos se lleva?". Gandhi responde sin titubear: "¡Claro que el dinero, profesor!". El profesor sonriendo le dice: "Yo, en su lugar, hubiera agarrado la sabiduría, ¿no le parece?" Gandhi responde: "Cada uno toma lo que no tiene profesor".
El profesor Peters, histérico ya, escribe en la hoja del examen "IDIOTA" y se la devuelve al joven Gandhi. Éste toma la hoja y se sienta. Al cabo de unos minutos se dirige al profesor y le dice: "Profesor Peters, usted me ha firmado la hoja, pero no me puso la nota.
Ser feliz es encontrar fuerza en el perdón, esperanza en las batallas, seguridad en el palco del miedo, amor en los desencuentros. Ser feliz no es solo valorizar la sonrisa, sino también reflexionar sobre la tristeza.