MUJERES DESTACADAS EN TIEMPOS DE

LA COVID – 19

Verónica Claros Barrón

HEREDERA DE UN EJEMPLO DE DIGNIDAD ESPITIRUAL

Mujer inteligente

MIRA DONDEOTROS NO VEN NADA

Verónica Claros Barrón, nieta del poeta y periodista, Jorge Claros Lafuente, quien fuera un destacado y genuino militante del PCB, el abuelo fue referido con nostalgia, agradecimiento y ponderación por Verónica, mujer de personalidad destacada en la ciudad de Cochabamba, quien recordó que Jorge, fue parte del grupo “Gesta Bárbara”.

Claros Lafuente, nació en Punata (llamada La Perla del Valle, es una ciudad y municipio de Bolivia, capital de la provincia de Punata en el departamento de Cochabamba. Su nombre deriva del quechua y significa "altura o lugar alto". Falleció en esta misma ciudad a la edad prematura de 62 años. Como periodista estuvo ligado a “Los Tiempos”, de Cochabamba, “Presencia” y “Hoy”. Fue miembro de la Unión de Poetas y de la Sociedad de Escritores de Cochabamba.

Para Claros Lafuente, el sufrimiento humano es parte de una búsqueda: la búsqueda de la humanidad en lo humano. Al cantar el sufrimiento de su pueblo, el poeta lo encamina, en cierta forma, hacia su final redención, hacia el encuentro con su más plena humanidad. Estos serían pues los alcances y las funciones del hacer literario, tal como Claros Lafuente los entiende en torno a la escritura de “De profundis".

En el poema ‘Lágrimas de estaño’ expresa: "Tu lágrima de estaño / en un mapa de penas que nos guía en tu vida, / al yermo sin orillas de su profunda angustia.../ Tu lágrima de estaño tiene sabor de sangre / y sabor de salitre y de planta marina".

Escribió los libros de poesía: Lágrimas de Estaño (1964) y De profundis (1970). Sus más destacados poemas, están publicados en la ANTOLOGÍA POÉTICA DE Yolanda Bedregal.

Verónica Claros Barrón, nació en Cochabamba, Bolivia, el 17 de marzo de 1986. En esta noble ciudad de Cochabamba, Verónica alumbró su vida en esta capital que es el centro de Bolivia. 

Cuando viajo a la conocida “Llajta”, siempre advierto un cerro en el este, donde aparece un teleférico que asciende a la enorme estatua del Cristo de la Concordia con vista al área circundante. Mi paseo habitual, es siempre por el centro de la ciudad donde está la Plaza 14 de Septiembre, un asiento colonial rodeado de galerías y la catedral barroca andina de San Sebastián.

Me pierdo en El Prado, caminando al asecho de lo insólito y visitando más tarde los alrededores. Hay muchas iglesias coloniales, como la de Santo Domingo con su impresionante fachada de piedra tallada. 

Al destacar a Verónica, recuerdo siempre a Cochabamba, como cuna de grandes hombres, como Augusto Céspedes, uno de los más grandes escritores latinoamericanos. Tuve el privilegio de observarle trabajar su comuna editorial diaria en el periódico HOY. En 30 líneas escritas a máquina y en 15 minutos (hoy 2.300 caracteres), sus críticas asomaban devastadoras. Mezclaba el periodismo de batalla y la sátira en dosis letales.

Amigo mío y mentor, Armando Soriano Badani. Leerlo me embelesa por la calidad de su escritura, la maestría en sus versos. Aportó con su obra al enriquecimiento del arte y la cultura.

Jaime Laredo, eximio y talentoso violinista, ganó el primer premio en el concurso internacional de violín Reina Isabel de Bruselas en mayo de 1959, dejando a Bolivia con la mejor imagen de la música clásica.

Simón I. Patiño, se inició en la mina Huanchaca, como laborero. Su éxito fue el descubrimiento de una veta muy rica el año 1900, en la mina La Salvadora, en el cerro Llallagua de Potosí. Formó un complejo importante con las minas de Llallagua, Catavi, Uncía y Huanuni, entre otras. Para transportar minerales construyó el Ferrocarril Machacamarca Uncía en 1911.

Siempre admiré la oratoria de Marcelo Quiroga Santa Cruz; tenía fuego en la voz. Intelectual de relevante formación, su libro LOS DESHABITADOS, es su mejor legado literario.

Cuando mi padre trabajaba en PRESENCIA, conocí a Jorge Claros Lafuente, Yo era muy joven, pero supe de él, de su formación política, intelectual y literaria, y hoy hablo de su nieta, esa gran humanista y mujer inteligente, llamada Verónica.

La enseñanza básica de Verónica, tuvo como escenario el Colegio San Bernardo de Tarija Enseñanza Básica Colegio San Bernardo de Tarija, pasando a la enseñanza media en el Instituto Americano Cochabamba y su enseñanza superior en la Universidad Mayor de San Simón en la Facultad de medicina, en el Programa de nutrición.

Más adelante prosiguió estudios profesionales en la Universidad Del Valle UNIVALLE, graduándose en Experta en cosmetología y estética.

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PREGUNTAS A

VERÓNICA A LO

MARCEL PROUST

1. ¿Principal rasgo de tu carácter?

La seriedad

2. ¿Qué cualidad aprecias más en un hombre?

La inteligencia y la empatía

3. ¿Y en una mujer?

La inteligencia y la valía

4. ¿Qué esperas de tus amigos?

Que estén, que sean leales y sinceros

5. ¿Tu principal defecto?

Desistir de lo que se complica

6. ¿Tu ocupación favorita?

Leer, cocinar, escribir, oír música

7. ¿Tu ideal de felicidad?

Un día de tranquilidad en la montaña, poder hacer algo por los niños en orfandad, la estabilidad económica y política de los países también me haría feliz

8. ¿Cuál sería tu mayor desgracia?

Las guerras ya lo son, el hambre y la pobreza extrema, es una desgracia en este momento. Para mi todo tiene solución, en mi vida no hay “desgracia” alguna.

9. ¿Qué te gustaría ser?

Un extraterrestre, chef, escritora, navegante, patinadora, director de orquestas, etc.

10. ¿En qué país desearías vivir?

En uno donde haya paz y se respete el medio ambiente.

11. ¿Tu color favorito?

Azul

12. ¿La flor que más le gusta?

Rosas

13. ¿El pájaro que prefieres?

Thraupis episcopus (azulejo)

14. ¿Tus autores favoritos en prosa?

Néstor Taboada Terán, Jorge LuisBorges, Julio Cortázar, Gabriel García Márquez, Emily Brontë, Fiódor Dostoyevsky, el Dandy por supuesto. Y muchos más

15. ¿Tus poetas?

Jorge Claros Lafuente (mi abuelo), Denis Alfaro, Benedetti, Neruda, (todos los de la pregunta anterior), Anna Ajmatova, William Blake, Fernando Pessoa y muchos, muchos más.

16. ¿Un héroe de ficción?

El Conde Drácula

17. ¿Una heroína?

La hada Madrina; que afortunadamente en la vida real, hay muchas

18. ¿Tu músico favorito?

Tchaikovsky, Mozart, Chopin (la música de hoy, es un asco)

19. ¿Tu pintor preferido?

Dalí, Van Gogh

20. ¿Tu héroe de la vida real?

Creo que el héroe cambia según la etapa, si fuera niña diría mi mamá o mi papá. Muchas veces fui yo misma el “héroe” que necesité. El héroe de estos días mi mejor amigo.

21. ¿Tu nombre favorito?

Verónica. Por su significado; imagen verdadera.

22. ¿Qué hábito ajeno no soportas?

La bulla, la mentira, y la falta de tolerancia

23. ¿Qué es lo que más detestas?

El abuso en todas sus formas

24. ¿Una figura histórica que te ponga mal?

Los campos de concentración

25. ¿Un hecho histórico de armas que admires?

La liberación de todos los pueblo

26. ¿Qué virtud desearías poseer?

Perseverancia, templanza, y valentía.

27. ¿Cómo te gustaría morir?

Entendiendo mis sentidos y siendo consciente del momento.

28. ¿Cuál es el estado más común de tu ánimo?

Tranquilidad

29. ¿Qué defectos te inspiran mayor indulgencia?

El abuso, la mentira.

30. ¿Tienes un lema?

Ser considerado, respetar el medio ambiente y hagas lo que hagas, hazlo con amor

31. Signo del zodiaco

Piscis

32. ¿Qué usas para dormir?

Pijama

33. Fecha (día) de nacimiento.

El 17 de marzo de 1986

34. Tu familia más íntima la componen:

Todos los que amo y siempre están

35. ¿Cuál es tu ropa favorita?

No tengo, me gusta lo cómodo y abrigado así como lo fresco.

36. ¿Te gusta Cortázar?

Si, mucho, me gusta lo que escribió, y también como vivió, su interés y aporte a la humanidad

37. Dios es para ti:

Una chispa en mí

Julio Ríos Calderón

Observar las respuestas de Verónica Claros Barrón, al cuestionario llamado “a lo Marcel Proust”, es vaticinar la existencia de una mujer rociada de inteligencia, que pasa por la independencia. No necesita de nadie para ser ella. Sus metas son suyas y sólo necesita de ella para alcanzarlas. Su mejor compañía es ella misma y si va a estar con alguien, en una relación de pareja o por simple amistad, es porque así lo decide. No para buscar su media naranja porque Verónica no es la mitad de un ser. Es una mujer completa que ha decidido compartir su originalidad y esencia con alguien más. Esa independencia se traducirá en su aspecto. Ningún cosmético –siendo profesional en ello– la hará verse mejor.

Verónica mira con ojos nuevos, renovados, lo que los demás miramos con vista atufada o sobre segada por la angustia de sobre existir. Sabe mirar, donde otros no observan nada. CASA TOMADA fue la referencia para interesarme del trabajo de tan destacada mujer. CASA TOMADA, me recuerda la amistad a la distancia con el escritor Julio Cortázar. CASA TOMADA, me trae a la memoria la casa de la abuela en Cochabamba donde vivió mi hijo Juan-Cristóbal.

Y para llegar al escenario donde habita Verónica, y donde cifra su metamorfosis de profesional Nutricionista a comercializadora para el vestir elegante, trabajo en el que ella es su propia gerente, me imagino yo caminar desde una avenida por un sendero y muchos jardines de flores y una calle que lleva el nombre del coronel Marzana, héroe indiscutible de la Guerra del Chaco, como buscando en la montaña, la gruta secreta en que oficia su día a día esta mujer de expresión hermosa, seria, respetuosa, en Cochabamba. Puede que ella ahí, esté leyendo una obra de William Blake, a tiempo de escuchar un Nocturno de Chopin.

Heredera de un ejemplo de dignidad vocacional intelectual, de valores y principios de su abuelo, el poeta y periodista, Jorge Claros Lafuente, el connotado intelectual dejó un legado que su nieta lo recogió con su ejemplo, su prosa clara y su verso profundo.

“Cuando bajo tu choza/ el sudario de sombras te cobija y te hiela,/ las dos lunas que brillan en tus turbias pupilas,/ alumbran a tu hijo arropado en tu seno,/ a tu hijo de rostro de papel desteñido/ por el pincel del tiempo”.

Seguramente Verónica está recitando para recordar al abuelo con devoción, siguiendo la lectura romántica e incisiva de un poema de Claros Lafuente, que expresa: “Tus pechos están secos y estriados como hojas/ sin savia ni verdor, y a tu hijo alimentas/ tan sólo con el pan inmaterial que lleva/ la sal de tu sonrisa.” 

A Verónica le gusta viajar por el mundo, conociendo el planeta, visitando grandes ciudades como Buenos Aires en Argentina, y paseando por La Boca, La Valle, o visitando a Mafalda, y comiendo en un restaurante, donde aparece Julio Cortázar en un cuerpo de bronce. La vimos con el autor de Rayuela e Historia de Famas y Cronopios, y El Perseguidor. Increíble. Se parece al mismo Julio de carne y hueso.

Pero también Verónica estuvo en Sucre, la dulce, ciudad embriagada de cultura barroca y extraordinarias muestras del coloniaje, en cuyo aire se respira la Universidad Mayor Real y Pontificia de San Francisco Xavier de Chuquisaca, por la que pasaron insignes hombres latinoamericanos.

Mañana estará en Tarija, o en Londres, pero siempre soñando o meditando en una colina, el pasar de un cometa, o degustar una sabrosa comida que ella misma ha preparado. Sonreír siempre, porque para Verónica, esta joven e inteligente mujer, todo tiene solución. Las guerras ya son una desgracia, el hambre y la pobreza extrema, es una desgracia en este momento. Sonreír siempre, no obstante, la pandemia que dejó muchas cosas terribles de la mano de la Covid 19.

Verónica Claros, está graduada en nutrición y es experta en belleza, cosmética y cuidado personal. El pensamiento que refiere en su cuenta de Twitter dice: “Sólo los peces muertos siguen la corriente”. Nacida bajo el signo de Pscis, ella es romántica, espiritual y emocional. Da fe a los sueños y confía en conseguir sus metas, por muy alejadas que parezcan, lo que la conduce, en la mayoría de los casos, al triunfo. Como pisciniana se marca un objetivo, lo acaba consiguiendo, porque entre sus virtudes está la constancia y la paciencia.

By Julio Ríos Calderón

To observe the answers of Verónica Claros Barrón, to the questionnaire called "a la Marcel Proust", is to predict the existence of a woman sprinkled with intelligence, who passes through independence. She doesn't need anyone to be her. Her goals are hers and you only need her to achieve them. Her best company is herself and if she is going to be with someone, in a couple relationship or just for friendship, it is because she chooses to be. Not to look for her better half because Veronica is not half of a being. She is a complete woman who has decided to share her originality and essence with someone else. That independence will translate into her appearance. No cosmetics -being a professional at it- will make her look better.

Veronica looks with new, renewed eyes, at what the rest of us look at with a stunted view or one that is overly mowed down by the anguish of over-existence. She knows how to look where others see nothing. CASA TOMADA was the reference for my interest in the work of such an outstanding woman. CASA TOMADA reminds me of my long distance friendship with the writer Julio Cortázar. CASA TOMADA brings to mind my grandmother's house in Cochabamba where my son Juan-Cristobal lived.

And to get to the scene where Verónica lives, and where she figures her metamorphosis from a professional nutritionist to a marketer for elegant clothing, a job in which she is her own manager, I imagine myself walking from an avenue along a path and many flower gardens and a street named after Colonel Marzana, undisputed hero of the Chaco War, as if searching in the mountains for the secret grotto in which this woman of beautiful, serious, respectful expression in Cochabamba carries out her day to day work. She may be there, reading a work by William Blake, in time to listen to a Chopin Nocturne.

Heiress to an example of intellectual vocational dignity, values and principles of her grandfather, the poet and journalist, Jorge Claros Lafuente, the renowned intellectual left a legacy that his granddaughter took up with her example, her clear prose and profound verse.

"When under your hut/ the shroud of shadows covers you and freezes you,/ the two moons that shine in your eyes/ the two moons that shine in your eyes the two moons that shine in your cloudy pupils,/ illuminate your son tucked in your bosom,/ your son with a face of faded paper/ by the brush of time".

Verónica is surely reciting to remember her grandfather with devotion, following the romantic and incisive reading of a poem by Claros Lafuente, which expresses: "Your breasts are dry and striated like leaves/ without sap or greenery, and you feed your son/ only with the immaterial bread that carries/ the salt of your smile". 

Verónica Claros Barrón is a very beautiful woman, with clear and expressive eyes. In the photo that illustrates this chronicle we can see her through a very low-cut white blouse, dressed with her naked torso. 

Verónica Claros, has a degree in nutrition and is an expert in beauty, cosmetics and personal care. The thought that she refers to her on her Twitter account says: "Only dead fish go with the flow." Born under the sign of Psces, she is romantic, spiritual, and emotional. She believes in her dreams and trusts in achieving her goals, no matter how far away they may seem, which leads her, in most cases, to victory. As a Piscinian she sets a goal, she ends up achieving it, because among her virtues are perseverance and patience. Spiritual in body and soul, clad in white with lots of skin, she betrays her intellect and shrewd examination of conscience.

Verónica likes to travel the world, getting to know the planet, visiting big cities like Buenos Aires in Argentina, and walking through La Boca, La Valle, or visiting Mafalda, and eating in a restaurant, where Julio Cortázar appears in a bronze body. We saw her with the author of Rayuela and Historia de Famas y Cronopios, and El Perseguidor. Incredible! She looks like the same Julio in flesh and blood.

But Verónica was also in Sucre, the sweet city, intoxicated with baroque culture and extraordinary examples of colonialism, in whose air one breathes the Universidad Mayor Real y Pontificia de San Francisco Xavier de Chuquisaca, through which distinguished Latin American men have passed.

Tomorrow she will be in Tarija, or in London, but she will always be dreaming or meditating on a hill, the passing of a comet, or tasting a tasty meal that she herself has prepared. Always smiling, because for Verónica, this young and intelligent woman, everything has a solution. Wars are already a disgrace, hunger and extreme poverty is a disgrace at the moment. Smile always, however, the pandemic that left many terrible things at the hand of the Covid 19. Her unwavering faith calls her to optimism that better days will soon come for the world.

Julio Ríos, licenciado en Ciencias de la Comunicación UCB y diplomado en investigación periodística por la Universidad de la Jolla, San Diego California USA, es escritor y crítico de arte. En la actualidad se desempeña como consultor y asesor en proyectos de redacción. Es director de RÍOS / ASESORES EN COMUNICACIÓN. Ha escrito los libros DIECIOCHO CRÓNICAS Y UN RELATO, la novela LA TRIADA DE LA MOSCA (Primera Edición 2008 y Segunda Edición 2016), y EL ALTO PARA TODOS (2017).  

© 2022

 

 

 

 

IN MEMORIAM, Jorge Claros Lafuente

(Punata, Cochabamba, Bolivia, 1925 - Cochabamba, 1987)

 

Se lo recuerda por sus principios progresistas e identificación con los postulados del pueblo y particularmente de los sectores populares, fue perseguido por los duros regímenes militares, que ocasionaron su exilio a la Argentina durante el régimen de facto, truculento y de arbitrario origen del entonces Cnl. Hugo Bánzer Suárez, de 1971 a 1978.

Fue corresponsal de Presencia en Cochabamba. Amigo de mi padre Mario D. Ríos Gastelú (Or. 1931-LP 2022), periodista y escritor fallecido hace tres meses a la edad de 91 años. 

Papá lo refería como por su desinteresada labor en beneficio de la juventud, la que constituyó como un verdadero maestro para las futuras generaciones, que agradecidas recibieron su mensaje, siempre oportuno y positivo. Fue un combativo dirigente sindical de los trabajadores de la prensa. Sus valores y principios se han puesto de relieve, en su nieta Verónica Claros Barrón, protagonista de este reportaje especial.