miércoles, 3 de noviembre de 2021

 



TODOS SANTOS

EN TIEMPOS DE LA COVID 19

EN SILENCIO CON MIS SERES QUERIDOS

IN MEMORIAM:

Elva Calderón de Ríos

David Ríos Reinaga

Raquel Gastelú de Ríos

Arturo Calderón Neira

Carmen De La Barra de Calderón

Julio Calderón De La Barra

Rebeca De La Barra

José David Ríos Urquieta



La topografía de La Paz hace que para llegar hasta la tumba de mi Madre, que asoma junto a mis seres más queridos, en el Cementerio Jardín, hay que ascender desde el comienzo de la avenida Costanera y calle 1 de Obrajes, por unos escalones de piedra rodeados de verdes pastos y flores, y una segunda subida de gradas, como buscando en la montaña la gruta secreta en que se oficia el rito de Todos Santos, y del propicio culto a recordar las almas de mi familia más cercana.

A la sombra de la tumba comparto momentos de oración en una tarde de martes, precedida por una lluvia a cántaros que luego de calmarse la tormenta y ya en el jardín Robles, percibo a mi Madre, mis cuatro abuelos, una tía y un tío muy queridos, y un sobrino carnal que durante la tarde estuvieron cerca a mí.

Al recordar a quienes se fueron materialmente de este mundo, estallan los latidos de los territorios espirituales y la presencia de quienes están siempre conmigo, no obstante reposar en la profundidad de las sombras.

Son ellos, los que vivieron su vida y los que mueren su muerte. Los que desde las tinieblas nos hablan, nos acompañan y nos orientan porque hay respuestas que surgen entre lobregueces, como también, en medio del silencio que envuelve el ámbito en que vivimos, muy cerca de los que murieron.

Aquí en el cementerio, en un silencio íntimo, todo es murmullo adormecedor, cuando ya no hay caricias a mi piel y sólo siento latidos de mi sangre.


JULIO RÍOS CALDERÓN

Cementerio Jardín, sector LOS ROBLES