lunes, 29 de noviembre de 2021


PELÍCULAS DVD EN TIEMPOS DE

LA COVID – 19

 

ROGER MOORE

IAN FLEMING JAMES BOND 007



 The spy who loved

EL ESPÍA QUE ME AMO

La espía que me amó (The Spy Who Loved Me), estrenada en 1977, es la décima entrega de la saga de James Bond y la tercera en ser protagonizada por Roger Moore. Fue dirigida por Lewis Gilbert y el guion fue escrito por Christopher Wood y Richard Maibum.

La película toma su título de la novela homónima de Ian Fleming, el décimo libro de la serie de novelas de James Bond, aunque no contiene ningún elemento de la trama de la novela siendo la primera película de Bond con un guion completamente original para el cine, debido a disputas de derechos de autor de Kevin McClory con la novela original.

La película cuenta la historia de un megalómano solitario llamado Karl Stromberg, que planea destruir el mundo y crear una nueva civilización bajo el mar. Bond se asocia con una agente rusa, Anya Amasova, para detener a Stromberg.

La espía que me amó contó con un presupuesto de 14 millones de dólares y fue un gran éxito de taquilla: recaudó más de 185 millones de dólares, también fue bien recibida por la crítica.​

La banda sonora, compuesta por Marvin Hamlisch, también fue recibida con éxito. La película fue nominada a tres premios Óscar, entre otras nominaciones.

En la secuencia precréditos ocurre el robo de dos submarinos de misiles balísticos, uno de la Marina Real Británica y otro de la Armada Soviética. En el Kremlin el general Anatol Alexis Gogol (Walter Gotell), líder del KGB llama a la agente Anya Amasova (Barbara Bach) alertándola de la situación, mientras está con su prometido Sergei Barzov (Michael Billington) en un sitio de descanso.

Mientras tanto M (Bernard Lee) hace que Moneypenny (Lois Maxwell) llame a su mejor agente —es decir James Bond (Roger Moore)— para que se encargue de la investigación. 

Este se encuentra realizando una misión en Bengarten, Austria donde también sostiene una relación con una hermosa chica (Sue Vanner), la cual al ver que Bond se iba lo delata con varios agentes enemigos que lo persiguen y le disparan, y tras una gran persecución en nieve da muerte a uno de sus atacantes y logra escapar en un paracaídas con la bandera británica.

Mientras, la agente Amasova (también llamada agente Triple X) llega al cuartel de la KGB y se le pide investigar la desaparición del submarino ruso y a la vez se le da la mala noticia de que su prometido, quien también era agente, fue asesinado en Austria en medio de una operación de la Inteligencia Británica. 

Entre tanto Bond, también enterado de la pérdida de un submarino, llega al buque insignia de la Marina británica donde se encuentra con Q, el ministro de defensa Sir Frederick Gray (Geoffrey Keen), el capitán Benson (George Baker) y con el almirante Hargreaves (Robert Brown) y descubren que el submarino estaba en aguas rusas detectado gracias a las ondas de calor que emite además de saber de la venta del sistema de localización de submarinos el cual podría estar en venta del mejor postor.

Mientras el empresario marítimo Karl Stromberg (Curd Jürgens) le paga a dos socios; el doctor Bechmann (Cyril Shaps) y el profesor Markovitz (Milo Sperber) la información que estos le suministraron de los submarinos británico y soviético aunque les informa de la venta del sistema de localización de submarinos y por ello asesina a su secretaria (Marilyn Galsworthy), por ser quien vendió la información y por ende ser conocedora cercana de los planes de Stromberg. 

Mientras su base Atlantis emerge del agua Stromberg asesina a Bechmann y a Markovitz para no dejar rastro de lo que hizo, a la vez que le ordena a dos secuaces; Sandor (Milton Reid) y Jaws (Richard Kiel) matar a todo aquel que tuviera el microfilm que contenga información de los submarinos.


En Egipto, Bond se encuentra con el Jeque Hosein (Edward de Souza) un viejo amigo que lo lleva con Aziz Fekkesh (Nadim Sawalha), quien tiene un apartamento en El Cairo.

Bond al día siguiente acude al departamento de Fekkesh siendo recibido por Felicca (Olga Bisera) quien le dice que Fekkesh se encuentra ausente pero Sandor quien vigilaba a Bond y esperaba a Fekkesh da muerte a Felicca y ambos inician una pelea en la azotea del edificio mata a Sandor cayendo de la azotea no sin antes decirle a Bond que Fekkesh estaba en las pirámides.

Esa misma noche 007 llega a las pirámides de Guiza donde ve que su colega la agente Amasova se encontraba conversando con Fekkesh. Este se ausenta para después ser asesinado por Jaws quien lo vigilaba. Bond sigue a Fekkesh y presencia el asesinato y trata de confrontar a Jaws quien escapa gracias a la variación de luces del acto en las pirámides, Bond se acerca al cadáver de Fekkesh viendo que tenía una cita con Max Kalba en un club en la noche siguiente.

Luego de encontrarse con Amasova le dice que no mató a Fekkesh y después se enfrenta a agentes soviéticos que lo acusaban de haberlo matado y que a su vez acompañaban a Amasova.

A la noche siguiente, 007 se dirige a un bar donde Fekkesh se iba a reunir con un hombre que poseía el microfilm, Max Kalba (Vernon Dobtcheff) y tiene un ameno encuentro con la agente Triple X donde se conocen, aunque uno sabe mucho del otro, e intentan comprar el microfilm como diera lugar, pero Kalba al recibir el engaño de una falsa llamada es muerto por Jaws, disfrazado de reparador telefónico, donde roba el microfilm.

Ambos agentes lo siguen metiéndose en la camioneta del asesino hasta en medio del desierto a una antigua construcción egipcia, Jaws logra escabullirse y se enfrenta a Bond hasta que recuperan el microfilm pero enfrentándose al asesino quien cae inconsciente luego de provocar la caía accidental de un techo en reparación. 

Los dos agentes logran escapar en la camioneta la cual se avería en medio del desierto. Al llegar al río Nilo un barquero ofrece llevarlos a El Cairo, Bond revisa el microfilm, el cual es robado por la agente quien lo hace dormir con un somnífero luego de que ambos compartieran un beso.

Al llegar a El Cairo, Bond se dirige al templo de Abu Simbel donde se encuentra con su superior M, su colega Gogol, Moneypenny y la agente Amasova. Tras comprobar que el microfilm era auténtico, la información importante había sido borrada y en el microfilm se descubre con la ayuda de Q que la empresa de Stromberg poseía el dispositivo, esto hace que colaboren los mejores agentes de los servicios secretos británico y soviético: James Bond y Anya Amasova.

Al día siguiente, Bond y Amasova llegan a Cerdeña para contactar a Stromberg, cuando viajaban en tren se enfrentan de nuevo a Jaws quien trata de asesinarlos pero Bond domina la pelea arrojando a Jaws fuera del tren luego de electrocutar sus dientes, ambos pasan la noche juntos estando Amasova agradecida con Bond y este levemente herido, pero poco a poco él y Amasova se empiezan a enamorar.

Al llegar a Cerdeña Q le da a ambos un coche Lotus Esprit con el cual se transportan a su hotel y ven un mensaje de Stromberg donde les concede una cita. Naomi (Caroline Munro), la asistente de Stromberg, los lleva a Atlantis, haciéndose pasar por Robert Sterling; un biólogo marino y fingiendo una relación marital con Amasova.

Bond visita a Stromberg donde ambos comparten conocimientos sobre varias especies marinas y descubre que el multimillonario y desequilibrado Stromberg planea propiciar un nuevo génesis bajo las aguas, a la vez que Amasova veía una clave de la implicación de Stromberg en la desaparición de los submarinos; su buque cisterna Liparus; uno de los más grandes del mundo.

Una vez que ambos agentes abandonan el cuartel de Stromberg, este confirma junto a Jaws que ellos dos eran agentes y le ordena la muerte de ambos. Bond utilizando su Lotus Esprit proporcionado por Q, logra vencer a Jaws y varios secuaces de Stromberg.

Luego son perseguidos por Naomi quien les dispara y Bond convierte su carro en un submarino y dispara un misil contra Naomi. Dentro del Lotus submarino observan las bellezas del océano para luego acercarse a la guarida del villano, cuya parte submarina contiene una sala donde empleados de Stromberg observan un enorme mapa, pero son atacados por asesinos de Stromberg y aunque logran neutralizarlos, el coche es parcialmente dañado.

Tras escapar de morir, Bond notifica a Amasova que el Liparus no había tocado puerto aunque un submarino los llevaría a ver el buque, sin embargo, tras ver que Bond tenía un encendedor traído de Austria, Amasova le muestra una foto de su prometido Sergei Barzov quien fue asesinado hacia tres semanas, confirmando que uno de los atacantes de Bond que murió en la secuencia precréditos resultó ser Barzov. Aunque 007 no sabía ni le logró reconocer el rostro, la agente promete que una vez terminada la misión matará a 007.

Más tarde en el submarino USS Wayne logran ver que el Liparus nunca tocó puerto y que siempre había estado en medio del océano. El submarino es capturado por el Liparus el cual contiene dos compuertas en su proa, la tripulación secuestrada junto con Bond y Amasova, quienes se enteran de los planes de Stromberg: destruir a la humanidad para construir su mundo bajo el agua, haciendo que los submarinos secuestrados lancen cada uno un misil atómico a Moscú y otro un misil sobre Nueva York provocando una guerra nuclear.

La agente es secuestrada por el villano y Bond escapa de sus captores liberando a la tripulación del submarino y de los demás secuestrados, los cuales se arman y se unen para matar a los secuaces de Stromberg. Sin embargo al intentar llegar a la sala de control esta se encuentra blindada y fuertemente protegida y Bond con el detonador de un misil atómico logra destruir el blindaje y entrar al puente del buque y hacer que los submarinos se lancen el misil uno al otro.

Frustrados los planes de Stromberg, Bond y las tripulaciones destruyen el buque y huyen para buscar a Atlantis, la guarida de Stromberg con el fin de destruirla y Bond usando una motocicleta acuática enviada por Q pide 40 minutos para rescatar a Amasova.

Bond logra entrar a la base donde asesina a Stromberg antes de que lo matase, derrota a Jaws usando un enorme magneto hacia su dentadura metálica y arrojándolo a un tiburón (el mismo con el que Stromberg había matado a su secretaria) pero Jaws logra vencer al escualo y huir, y Bond rescata a Amasova en el momento en que el submarino lanza un potente misil destruyendo Atlantis.

Bond y Amasova escapan por una cápsula de Atlantis, Amasova se propone a matarlo con su propia pistola pero el agente la seduce como 'última voluntad' y hacen el amor mientras están en la cápsula de escape. Una vez destruida Atlantis son vistos con sorpresa e indignación por sus superiores cuando la cápsula es rescatada por un barco.


Julio Ríos

James Bond, el agente secreto británico está protagonizada por Roger Moore, para esta película en la que es enviado a El Cairo para investigar la desaparición de dos submarinos, uno británico y otro soviético. Para lograr su propósito en este delicado operativo, 007 contará con la colaboración y alianza de la Mayor Amasova (Barbara Bach), quien como espía lleva el nombre de “Triple X”.

La trama en sus capítulos iniciales de “El espía que me amó”, tiene como escenario, casi en su integridad en Egipto. El desarrollo de la película en las referidas primeras partes, es uno de los recorridos más entretenidos de toda la serie Bond con una aventura intensa llena de variantes en donde cabe el humor irónico, el romance con vínculo entre “bloques” ante un peligro común, los guiños a “Lawrence De Arabia” y la acción con la amenaza del gigante Richard Kiel como “Tiburón” (referencia contextual cinéfila al “Tiburón” de Steven Spielberg).

Más tarde, con escenas acuáticas, megalómano con influencias de Julio Verne y redundantes explosiones, la historia se espesa haciendo perder el primer interés de un conflicto de predecible solución. 007 a su paso se encontrará con situaciones que pondrán en peligro su existencia, conociendo a su vez las misteriosas islas del mediterráneo y enfrentando a una bella espía rusa, dotada de gran ingenio y demás atributos similares.

Al recordar el mejor cine de aventuras se debe nombrar a James Bond, un personaje con una extensa y brillante filmografía que hizo de la industria fílmica británica un evento global. La décima aventura de la saga es sin duda una de las más logradas en cuanto a la perfecta proporción de componentes de una cinta del 007, hermosas mujeres, infinidad de exóticas locaciones, los mejores automóviles, diabólicos villanos, y el siempre sombrío y misterioso pero encantador espía occidental, encarnado esta vez con gran acierto por Roger Moore, personificando una particular estirpe caballeresca no exenta de algunos toques de drama y comedia ligera, en fin, una gran elección para el papel, que aquí se luce haciendo la mejor interpretación de las siete veces que estuvo en el trono de uno de los personajes mas longevos, codiciados y populares del séptimo arte.

En el reparto, esta vez quien se encarga de poner en problemas a nuestro héroe es Karl Stromberg (Curt Jürgens) un demente que pretende aniquilar a la humanidad bajo la guerra nuclear y erigir un imperio bajo el mar. Este megalómano cuenta con la ayuda de un gigante de dientes metálicos apodado Jaws (Richard Kiel) como su simpático pero letal secuaz, uno de los personajes más queridos de la serie Bond. Dos chicas Bond importantes, asoman en el film. Bárbara Bach, como la integrante del dúo “007-tripe x” y Caroline Munro, como la villana. Esta última ilustra esta crónica –la observamos muy sensual con un atuendo muy escotado de mangas trasparentes y abierto hasta casi la cintura, mostrando mucha piel desnuda y el nacimiento sutil de los pechos desnudos de Carolina que no usa sujetador, a través de la indumentaria que viste con el cuerpo desnudo por debajo–, quien tiene una participación que se destaca en las escenas del helicóptero.

La dirección de Lewis Gilbert es otro punto a favor, fiel al estilo Bond, los saltos de género y tono brindarán al espectador de un rato agradable; el suspense y drama, el romance, la comedia y la acción lograrán la instantánea fascinación por el film.

A todas las proezas de esta cinta Bond se le suma la impresionante secuencia de apertura, el diseño de producción de Ken Adam, y la partitura de Marvin Hamlisch, con un memorable tema principal de Carly Simon. Razones que le valieron al filme de tres nominaciones a los premios “Oscar” de la academia.

By Julio Ríos

James Bond, the British secret agent stars Roger Moore, in this film in which he is sent to Cairo to investigate the disappearance of two submarines, one British and the other Soviet. To achieve his purpose in this delicate operation, 007 will have the collaboration and alliance of Major Amasova (Barbara Bach), who as a spy goes by the name of "Triple X".

The plot in the opening chapters of "The Spy Who Loved Me" is set almost entirely in Egypt. The development of the film in the first parts is one of the most entertaining of all the Bond series with an intense adventure full of variants in which there is room for ironic humour, romance with a link between "blocks" in the face of a common danger, nods to "Lawrence Of Arabia" and action with the threat of the giant Richard Kiel as "Jaws" (contextual reference to Steven Spielberg's "Jaws").

Later, with aquatic scenes, Jules Verne-influenced megalomaniacs and redundant explosions, the story thickens and loses the initial interest of a predictably resolved conflict. 007 will encounter life-threatening situations along the way, meeting mysterious Mediterranean islands and confronting a beautiful Russian spy, endowed with great wit and similar attributes.

When recalling the best adventure films, one must mention James Bond, a character with an extensive and brilliant filmography that made the British film industry a global event. The tenth adventure of the saga is undoubtedly one of the most successful in terms of the perfect proportion of components of a 007 film, beautiful women, plenty of exotic locations, the best cars, diabolical villains, and the always dark and mysterious but charming western spy, played this time with great success by Roger Moore, In short, a great choice for the role, who here gives the best performance of the seven times he has been on the throne of one of the most long-lived, coveted and popular characters of the seventh art.

In the cast, this time it is Karl Stromberg (Curt Jürgens), a madman who intends to annihilate humanity through nuclear war and build an empire under the sea, who is in charge of getting our hero into trouble. This megalomaniac is aided by a metal-toothed giant nicknamed Jaws (Richard Kiel) as his sympathetic but lethal henchman, one of the most beloved characters in the Bond series. Two important Bond girls feature in the film. Barbara Bach as the "007-tripe x" duo and Caroline Munro as the villain. The latter illustrates this chronicle we see her very sensual in a very low-cut outfit with transparent sleeves and open almost to the waist, revealing a lot of bare skin and the subtle emergence of Caroline's bare breasts, who does not wear a bra, through the clothes she wears with her naked body underneath, who has a prominent part in the helicopter scenes.

Lewis Gilbert's direction is another plus, true to Bond style, the genre and tone jumps will provide the viewer with an enjoyable time; suspense and drama, romance, comedy and action will make for instant fascination with the film.




Julio Ríos, escritor y crítico de arte, licenciado en ciencias de la comunicación, es asesor en proyectos de redacción. Escribió el libro DIECIOCHO CRÓNICAS Y UN RELATO, la novela LA TRIADA DE LA MOSCA (Primera Edición 2008 y Segunda Edición 2016), y EL ALTO PARA TODOS (2017). En la fecha trabaja una novela basada en la vida y obra de W.A.Mozart. Estudió en la Universidad Mayor Real y Pontifica de San Francisco Xavier de Sucre y en la Universidad Católica de La Paz. Hizo un diplomado en investigación periodística en la Universidad de La Jolla en San Diego, California.


UN ANTES. UN DESPUÉS. Bárbara Bach, la “Bond Girl” principal de la película de James Bond, “El espía que me amó”, aparece en sus años juveniles, mostrándose muy sensual. Usa una camisa blanca, casi crema muy escotada y abierta; no usa sujetador, a través de la piel desnuda, usando la indumentaria con el cuerpo desnudo por debajo.

UN DESPUÉS. La artista ya veterana pero bella, junto a su esposo Ringo Starr, el exbaterista del famoso grupo THE BEATLES. Un matrimonio muy feliz, que siempre pregona la paz. Hoy en tiempo de pandemia Bárbara y Ringo, utilizan el inevitable barbijo para cuidarse del contagio de la temible Covid – 19.

A BEFORE. A AFTER. Barbara Bach, the main "Bond Girl" in the James Bond film, "The Spy Who Loved Me", appears in her younger years, looking very sensual. She wears a white, almost cream shirt, very low-cut and open; she wears no bra, through bare skin, wearing the garment with the naked body underneath.

ONE AFTER. The veteran but beautiful artist with her husband Ringo Starr, the ex-drummer of the famous band THE BEATLES. A very happy marriage, always proclaiming peace. Today, in times of pandemic, Barbara and Ringo use the inevitable chinstrap to protect themselves from the contagion of the dreaded Covid-19.


 Roger Moore