lunes, 7 de febrero de 2022

   

PELÍCULAS DVD EN TIEMPOS DE

LA COVID – 19

AMERICAN PIE

7


LA GUÍA DEL AMOR

Escrita por David H. Steinberg

 PROTAGONISTAS

Jennifer Holland / Eugene Levy / Bug Hall 

 Brandon Hardesty / Beth Behrs 

Melanie Papalia / Kevin M. Horton

Rosanna Arquette / Cindy Busby / Naomi Hewer

Jasmine Mooney / Carrie Keagan


American Pie The Book of Love (título en español: American Pie 7: El Libro del Amor o American Pie 7: La guía del Amor en Hispanoamérica) es la séptima entrega de la saga American Pie y un nuevo Spin-off de la trilogía American Pie. Está escrita por David H. Steinberg y basada en los personajes creados por Adam Herz.

La historia transcurre en East Great Falls, 10 años después de los acontecimientos de American Pie. Los nuevos protagonistas de esta película son tres nuevos vírgenes desventurados: Rob (Hall), Nathan (Horton) y Lube (Hardesty).

Una noche, Rob accidentalmente prende fuego la biblioteca de la escuela, y encuentra "la Biblia" (el Libro del Amor), la creación del Sr. Levenstein (Eugene Levy). Desafortunadamente para ellos, el libro está hecho pedazos. 

El libro tenía consejos incompletos y los envía en un imposible viaje para perder su virginidad. Después de probar y fallar varias veces, se comprometen a restaurar el libro, y para ello, deben encontrar a Levenstein y a todas las demás personas que escribieron en el libro, y comenzar la restauración.

La historia comienza con Rob, quien entra a su dormitorio, y trata de masturbarse con un sándwich de mantequilla de maní (similar a la escena del pastel de manzana en la primera película). 

Mientras que él está haciendo esto, su perro, Frizzie, trata de comer el bocadillo, y Cody, el hermano de Rob, lo filma recibiendo esta satisfacción sexual no deseada. Más tarde, Rob se reúne con sus amigos, Nathan y Lube, en la escuela. 

Nathan revela que su novia, Dana (la escena se desarrolla en el auto de Nathan, primero se están besando apasionadamente, pero Nathan quiere más, quiere sexo oral), que se ha comprometido a abstenerse del sexo hasta el matrimonio a pesar de que ella ya se ha acostado con otras seis personas. 

Rob habla con Heidi, una chica por la que se siente atraído, y Stiffler. Stiffler dice que si Rob no hace nada por Heidi, él lo hará.

En clase, Lube tiene una fantasía sobre un grupo de animadoras, sobre todo con una llamada Ashley. Rob y Heidi se reúnen más tarde en la biblioteca de la escuela donde ella revela que es virgen, y sólo desea "conseguir tener algo de sexo".

En el baile de la escuela, Nathan trata de llegar a segunda fase con Dana, pero solo se las arregla para ofenderla debido a su compromiso de abstinencia. Rob intenta decirle a Heidi lo que siente por ella, pero es interrumpido por Nathan y Lube. 

Finalmente la encuentra en la biblioteca a punto de tener relaciones sexuales con otro estudiante, y deja caer una vela encendida en un recipiente en estado de shock. Esto pone a la biblioteca en llamas, lo que activa los aspersores de agua.

Al día siguiente, cuando Rob y Heidi hacen la limpieza de la biblioteca, Rob encuentra un compartimiento secreto que contiene 'La Biblia' (El Libro del Amor). Muestra el libro a sus amigos Nathan y Lube, y explica que se trata de un manual de sexo compilado de más de 40 años escrito por los estudiantes que lo encontraron. El libro se considera legendario pero lamentablemente ha sido dañado por el agua.

Más tarde, en el centro comercial local, Rob trata de probar algo del libro, "la adulación simple". Se acerca a Ashley en una tienda de lencería y habla con ella. Ashley lo lleva a un vestidor, se quita el sujetador y la parte superior, y le hace robar un sostén para ella.

Lamentablemente Rob es capturado y obligado a pagar por el sujetador con la tarjeta de crédito de su madre. Mientras tanto, Nathan va a la misa de Dana para hablar con ella, pero accidentalmente transmite la conversación explícita y muy personal a toda la congregación en el sistema PA de la iglesia.

El padre de Dana le prohíbe a ella ver a Nathan. Cuando recibe su factura de tarjeta de crédito, la madre de Rob trata de hablar con él sobre la compra de la ropa interior, lo que lleva a Rob a decir sarcásticamente que le gusta usar ropa interior de mujer. Él es nuevamente filmado por su hermano pequeño, quien sube las imágenes en Internet para que toda la escuela pueda verlas.

Al día siguiente, Heidi, Imogen y Dana están viendo un juego de baloncesto de la escuela en el que Rob y Stifler están jugando. Una chica llamada Katie trata de hablar con Stifler, pero él la rechaza. Rob vuelve a intentar decirle a Heidi cómo se siente pero es incapaz de hacerlo.

Lube descubre una página en la Biblia que habla de un burdel en Canadá y de una prostituta, Monique, quien tiene mucha experiencia. La entrada fue escrita en 1975, pero Lube lee mal la fecha como 1995, y decide ir. 

Cuando se encuentran con Monique, los chicos están disgustados ya que es una anciana, pero Nathan dice que deben ir de todos modos. Nathan y Lube dejan que Rob vaya primero, pero Monique muere mientras le realiza sexo oral. Ellos entran en pánico y regresan a Estados Unidos.

Rob, una vez más en la biblioteca, finalmente le dice a Heidi que se siente atraído por ella. Heidi dice que ella siente lo mismo, y se comprometen a hacerlo en la fiesta de Stifler más tarde. En la fiesta, Heidi oye a Rob gritar: "¡Esta noche me voy a echar un polvo!", y corre escaleras arriba. Stifler de nuevo rechaza a Katie cuando ella trata de hablar con él. Lube le dice a Ashley cómo se siente con ella, dando un discurso sobre cómo garantiza satisfacción sexual, pero ella todavía lo rechaza.

La amiga de Ashley está impresionada con lo que dijo y le dice a Lube de encontrarse en el piso de arriba, pero cuando encuentra un mensaje de texto ofensivo en su teléfono, ella se va. Nathan intenta reconciliarse con Dana pero la ofende, haciendo que ésta se vaya de nuevo. Rob encuentra a Heidi en la cama con Stifler y sale de la habitación.

Heidi lo sigue a la planta baja, pero Rob se niega a hablar con ella y comienza a beber en exceso. Él declara: "¡sólo los idiotas se emborrachan!" y luego se comporta groseramente con una chica al azar, que rápidamente va a la cama con él. 

Ella le pide que tenga relaciones sexuales con ella por detrás, pero Rob alucina y ve a Heidi diciendo: "No vas a poner tu pene seriamente en esa cosa, ¿verdad?". A continuación, Rob vomita en la espalda de la chica. A la mañana siguiente su madre le pregunta si él llegó a casa borracho, y le muestra una película que recibió en su teléfono, de Rob vomitando sobre la chica la noche anterior.

En un intento por restaurar la Biblia, Rob y sus amigos deciden encontrar a todas las personas que originalmente lo escribieron, con el fin de recrearla, comenzando con el creador original (Noah Levenstein). Con el paso del tiempo, tienen éxito en la reconstrucción del libro.

Rob y sus amigos luego van a un viaje escolar para esquiar. En una cabaña, donde algunos estudiantes están jugando al strip póker, Katie vuelve a intentar hablar con Stifler, quien vuelve a rechazarla.

Ella apuesta a Stifler que si ella gana en el póker tiene que pedirle disculpas y correr desnudo en la nieve. Stifler pierde y se ve obligado a pedir disculpas y salir a la calle desnudo, donde es violado por un alce.

Al día siguiente, los estudiantes están subiendo por la montaña en las góndolas, pero Nathan tiene relaciones sexuales con Dana en la sala de control del ascensor, y sin querer apagan la máquina de los ascensores.

En una góndola, Rob y Heidi se reconcilian con un beso. Ashley y Lube están en otro ascensor, donde Lube se cae cuando trata de buscar ayuda. Cuando Ashley baja por él, Lube le dice lo que siente por ella, haciéndola llorar. Heidi y Rob vuelven a la cabaña y tienen relaciones sexuales. Lube y Ashley también vuelven a la cabaña y tienen relaciones sexuales.

La película termina con Rob, Nathan y Lube devolviendo el recién restaurado libro donde Rob lo encontró, después de que Rob haya añadido su firma.

Como broche final, el hermano de Rob, Cody, entra en su habitación solo para encontrar un video en internet de él poniendo una aspiradora en su pene. Para su horror, éste ha sido visto casi 10 millones de veces. Rob termina la película con las palabras: "te tengo ja, ja".

 

Reparto

ActorPersonajeNotas
Bug HallRobert "Rob" Shearson
Brandon HardestyMarshall "Lube" Lubetsky
Kevin M. HortonNathan Jenkyll
Beth BehrsHeidi
Melanie PapaliaDana
Jennifer HollandAshley Lawrence
John Patrick JordanScott Stifler
Louisa LyttonImogen
Sherman HemsleyPastor
Curtis ArmstrongPete O'Donnell
Jim WynorskiEddie
Rosanna ArquetteMadeline Shearson
Eugene LevyNoah Levenstein
Cindy BusbyAmy
Naomi HewerAlyson
Nicolas Rolon CurioniCody
Adrienne CarterKatie
Edwin PérezGibbs
Shedrick MeansShedrick Means
Kevin FederlineGuardia fronterizo canadienseCameo
Dustin DiamondAlumno tipo #1Cameo
C. Thomas HowellAlumno tipo #2Cameo
Christopher KnightAlumno tipo #3Cameo
Tim MathesonCarlito Alumno tipo #4Cameo
Steve RailsbackAlumno tipo #5Cameo
Robert RomanusAlumno tipo #6Cameo
Bret MichaelsÉl mismoCameo


 
 


Julio Ríos

American Pie, llega por intermedio de un DVD, puntualizando el cine de los 90. Este comentario a una película antigua, sin vacilación alguna, entrevera una comedia adolescente que me hizo mirar el pastel de manzana con otros ojos que me hicieron perder todo posible contacto con la desvaída realidad que rodea al mundo a consecuencia de la vigencia de la Covid 19.

Cuatro amigos del instituto están frustrados; todos están a menos de cuatro semanas de graduarse para ir a la universidad y ninguno ha perdido la virginidad. Y hay algunos motivos relevantes para ello. Jim Levenstein (Jason Biggs), es un muchacho retraído al que su padre (Eugene Levy) loa asedora a través de revistas, literatura y filosofía sexual; Oz (Chris Klein) que juega al lacrosse en la escuela; Kevin (Thomas Ian Nicholas), quien no ha logrado llegar a consolidar la relación con su novia Vicky (Tara Reid); y, finalmente, Paul Finch (Eddie Kaye Thomas), un hipster extravagante que juega al golf y saborea mochacchinos. Para enmendarlo, los cuatro se proponen encontrar y seducir a una mujer con la que logren objetivamente dejar de ser castos.

En este escenario, arranca una de las comedias más importantes de los noventa y la primera de una larga serie de comedias, de calidad y originalidad variable. Como película adolescente de institinto, American Pie cumplió sobradamente su meta. Se trata de una cinta importante, hoy clásica, del imaginario de la cultura de finales de su década. Asimismo, permitió para dar proyección internacional a actores como Jason Briggs, Tara Reid o Seann William Scott, quienes por entonces comenzaban su carrera.

El éxito entre el público aseguró una tanda de ocho películas, en las que se siguió los pasos de los protagonistas en la universidad, el matrimonio e incluso en la madurez de la paternidad. Leí en el google, comentarios especializados  de implacábles críticos que no les gustó la película. Muchos de ellos la calificaron de obscena, lúbrica, enferma y lindeces similares.

Las artistas femeninas, son simpáticas, carismáticas, inteligentes, avispadas, siendo Jennifer Holland a la artista la observamos bellísima en está crónica donde asoma vestida con un traje sastre color verde de dos piezas con un colorido estampado con detalles de flores, muy escotado con la chaqueta abierta al torso desnudo y sin sujetador que lo luce con el cuerpo totalmente desnudo por debajo, es la preferida del público que sigió la saga de American Pie. Talentosa, hermosa y perspicaz en su rol que también al público enamora.

American Pie es a los noventa, lo que Porky's es para los ochenta: una película sobre tránsito a la madurez, con la excusa del sexo para contar una historia de autosuperación, de aceptación y de, echar finalmente una cana al aire y saber lo que se siente.

No todos estuvimos en esa situación de acercarnos a la mayoría de edad y querer experimentar el tinte erótico que la sociedad nos vende como el fruto prohibido, la panacea universal y, ocasionalmente, tabú y motivo de intretenimiento: el pastel de manzana.  American Pie, nos sume en un ejercicio de humor intelectual, de trabajados gags, de una historia elaborada acerca del tránsito a la edad adulta, con encendidos diálogos y monólogos trascendentales. El film permite entrever a cuatro muchachos inquietos, con ganas de experimentar, cometiendo auténticas barbaridades y locuras con tal de lograr sus objetivos.  

Es fundamental entender que  la película cumple su función, que es la de conmover con las circunstancias de una juventud en éxtasis. Sobre todo, las escenas fuertes y picantes para su momento, hoy insignificantes, son episodios que bien nos podrían haber pasado a cualquier de nosotros. Es probable que no solo no volvamos a mirar el pastel o el pie con los mismos ojos. Tragar cerveza en una fiesta de desmadre  tampoco se convirtió en una actividad que no invitara a echar un vistazo antes.  

Pero, el valor principal de la película no reside únicamente en estos dos detalles indecorosos (de diálolgo picante), sino también en la construcción de unos personajes cómicos y entrañables, que solo con su tirón y la premisa que asentaron, lograron sostener una serie de películas cuyos últimos títulos dan un nuevo sentido a la continuidad de una franquicia.

Los roles secundarios, se convierten en los grandes atractivos de esta cinta. Desde el padre de Jim, ese excepcional e impresionante papá despistado de Eugene Levy, hasta el paripatético Sherminator de Chris Owen (uno de los muchachos más queridos de la historia del cine y la TV). Asoma por otra parte, el arrogante y no poco gracioso Stiffler de Seann William Scott. Un circo completamente esperpéntico, que rodea y hace peculiar y casi única una historia "corriente" de adolescentes.

Noo todo es positivo en esta película. Después de ver American Pie otra vez, hay algo que nos ha removido por dentro. A título personal el autor de estas líneas no ha conseguido reírse con ella como la primera vez. De hecho, le ha resultado bastante redundante y, de no ser por la obligación de tener que hacer la crítica, hubiera ido pasando rápidamente escenas para no tener que tragársela entera. La película ha envejecido bastante mal, al tiempo que nosotros nos hemos hecho mayores. Hace 30 años era la monda, ahora ya no lo es tanto y nos parece incluso hasta descafeinado.

En este aspecto, quizá el problema radique en su humor netamente noventero, para el que el paso del tiempo no ha sido benévolo. Pero, además, también puede pasar que, como los personajes de la cinta, nosotros nos hayamos también vuelto un poco indiferentes y ya no seamos el público objetivo de la cinta. 

American Pie, no obstante, sigue siendo una película entretenida y una comedia adolescente de colegio que remató los noventa. También de culto para una generación. Lástima que estiraran el chicle con sus posteriores secuelas. Eso sí, por su culpa no volvimos a ver la tarta de manzana con los mismos ojos.

Se destaca la premisa, los golpes de humor, el Shermanator, la resolución del conflicto, el padre de Jim y sus intentos para ser moderno y buen padre a la vez. Nos deja acatar docilmente el consejo de los años, abandonando con donaire las cosas de la juventud; nosotros, envejecemos comos sus chistes y las secuelas. Las tonterías que nos hacían gracia con quince años ya no nos la hacen con sesenta y más.

Colabora con mucho brillo al film, las canciones de Hole, Simon y Garfunkel, Barenaked Ladies o un coro interpretando a Lovin’ Spoonful, es la cachonda relación de educación sexual entre Jason Biggs y su “padre” Eugene Levy.

Al margen de ello, concluyo resumiendo, que la historia se burla y explota en tono de farsa y con desigual gracia los miedos, apariencias e inseguridades adolescentes ante sus primeros contactos genitales.

By Julio Rios

STELLAR PERFORMANCE BY JENNIFER ACTRESS WHO ILLUSTRATES THIS CHRONICLE DRESSED IN A VERY LOW-CUT GREEN FLOWERED TAILORED SUIT WITH NO BRA THROUGH THE NAKED BODY UNDERNEATH.

American Pie, arrives via DVD, punctuating the cinema of the 90s. This commentary on an old film, without any hesitation, interweaves a teen comedy that made me look at apple pie with other eyes that made me lose all possible contact with the faded reality that surrounds the world as a result of Covid 19.

Four high school friends are frustrated; all are less than four weeks away from graduating for college and none have lost their virginity. And there are some relevant reasons why. Jim Levenstein (Jason Biggs), a withdrawn boy whose father (Eugene Levy) is rooting for him through magazines, literature and sexual philosophy; Oz (Chris Klein), who plays lacrosse at school; Kevin (Thomas Ian Nicholas), who has failed to cement a relationship with his girlfriend Vicky (Tara Reid); and, finally, Paul Finch (Eddie Kaye Thomas), a flamboyant hipster who plays golf and savours mochacchinos. To make amends, the four set out to find and seduce a woman with whom they can objectively stop being chaste.

This is the setting for one of the most important comedies of the nineties and the first in a long series of comedies of varying quality and originality. As a high school teen film, American Pie more than fulfilled its goal. It is an important, now classic film in the cultural imagination of the late 1990s. It also gave international exposure to actors such as Jason Briggs, Tara Reid and Seann William Scott, who were just starting out on their careers at the time.

The success with the public ensured a series of eight films, which followed the protagonists through university, marriage and even the maturity of parenthood. I read on google, expert reviews from relentless critics who didn't like the film. Many of them called it smutty, lubricious, sick and the like. 

The female artists, are nice, charismatic, intelligent, smart, smart, being Jennifer Holland the artist is beautiful in this chronicle where she appears dressed in a two-piece green tailored suit with a colourful print with flower details, very low-cut with the jacket open to the naked torso and without a bra: she does not wear a vest, nor basic underwear; she is naked behind the outfit that shows her body totally naked underneath, is the favourite of the public that followed the American Pie saga. Talented, beautiful and insightful in her role, she also charms the audience.

American Pie is to the nineties what Porky's is to the eighties: a coming-of-age film, with the excuse of sex to tell a story of self-improvement, acceptance and finally getting to know what it feels like.

Not all of us were in that situation of coming of age and wanting to experience the erotic dye that society sells us as the forbidden fruit, the universal panacea and, occasionally, taboo and motive for entertainment: apple pie.  American Pie, plunges us into an exercise of intellectual humour, of elaborate gags, of an elaborated story about the transition to adulthood, with heated dialogues and transcendental monologues. The film gives us a glimpse of four restless boys, eager to experiment, committing real barbarities and madness in order to achieve their goals. 

It is essential to understand that the film fulfils its function, which is to move us with the circumstances of an ecstatic youth. Above all, the strong and spicy scenes for their time, today insignificant, are episodes that could have happened to any of us. It is likely that not only will we never look at cake or pie with the same eyes again. Nor did swigging beer at a raucous party become an activity that didn't invite a look before. 

But, the main value of the film lies not only in these two unseemly details (of spicy dialogue), but also in the construction of comic and endearing characters, that only with their pull and the premise they established, managed to sustain a series of films whose last titles give a new sense to the continuity of a franchise.

The supporting roles are the big draws of this film. From Jim's father, Eugene Levy's exceptional and impressive clueless dad, to Chris Owen's paripathetic Sherminator (one of the most beloved guys in film and TV history). Then there's Seann William Scott's arrogant and not unfunny Stiffler. A completely grotesque circus, which surrounds and makes a "ordinary" teenage story peculiar and almost unique.

Not everything is positive in this film. After watching American Pie again, there is something that has moved us inside. Personally, the author of these lines has not managed to laugh with it as he did the first time. In fact, he found it rather redundant and, if it weren't for the obligation of having to review it, he would have quickly skipped through scenes so as not to have to swallow it whole. The film has aged rather badly, as we have grown older. Thirty years ago it was great, now it's not so great and even seems decaffeinated.

In this respect, perhaps the problem lies in its distinctly nineties humour, for which the passage of time has not been kind. But it may also be that, like the characters in the film, we too have become a little indifferent and are no longer the film's target audience.

American Pie, however, is still an entertaining film and a teenage high school comedy that topped off the nineties. Also cult for a generation. Too bad they stretched the bubblegum with its subsequent sequels. Of course, because of them we never looked at apple pie with the same eyes again.

The premise, the humour, the Shermanator, the resolution of the conflict, Jim's father and his attempts to be both modern and a good father all stand out. He lets us docilely take the advice of the years, gracefully abandoning the things of youth; we age like his jokes and the aftermath. The nonsense that was funny to us when we were fifteen is no longer funny to us when we are sixty and over.

Contributing a lot of brilliance to the film, the songs of Hole, Simon and Garfunkel, Barenaked Ladies or a choir performing Lovin' Spoonful, is the horny sex education relationship between Jason Biggs and his "father" Eugene Levy.

Apart from that, I conclude by summing up that the story mocks and exploits in a farcical tone and with unequal grace the fears, appearances and insecurities of adolescents about their first genital contacts.

 

 


 

Julio Ríos, escritor y crítico de arte, en la actualidad se desempeña como consultor y asesor en proyectos de redacción. Ha escrito los libros DIECIOCHO CRÓNICAS Y UN RELATO, la novela LA TRIADA DE LA MOSCA (Primera Edición 2008 y Segunda Edición 2016), y EL ALTO PARA TODOS (2017).

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UN ANTES: Jennifer Holland (Chicago, Illinois, Estados Unidos, 9 de noviembre de 1987) es una actriz y modelo estadounidense de cine y televisión. Hizo su debut en 2004 en series como Drake & Josh y CSI: Miami, logrando reconocimiento cuando participó en Zombie Strippers (2008), lo que le permitió dar un salto e interpretar a Ashley en American Pie Presents: The Book of Love (2009) y trabajar en The Suicide Squad (2021) de James Gunn.

Su rol más importante llegaría en 2009 cuando interpretó a Ashley en la cuarta parte de la saga cómica American Pie, en la película American Pie Presents: The Book of Love. Tras diversas apariciones en otras series de televisión, participó en dos episodios de la segunda temporada de American Horror Story, titulada Asylum.

En la primera foto, Jennifer, en una sesión de fotos luciendo un enterizo negro muy escotado, sin sujetador, que la artista lo luce con el cuerpo totalmente desnudo por debajo.

En la segundo foto, junto a su esposo James Gunn (San Luis, Misuri; 5 de agosto de 1966)  que es un director, guionista y productor de cine estadounidense, Jennifer asoma muy elegante con un vestido verde muy escotado y abierto con mucha piel desnuda en el torso hasta la cintura y sin sujetador. Lo luce con el cuerpo desnudo por debajo.

En la tercera foto, Jennifer muy sensual con una prenda “animal print” muy delgada y muy escotada, configurando su generosa anatomía desnuda, con sutiles detalles

En la cuarta foto Holland, durante los días alusivos al estreno de American Pie 7, “El libro del amor”. Alegre y satisfecha con su rol en la película, la artista sonríe al lado del poster y ficha técnica de la película vestida con un jeans y una blusa muy transparente color negro que trasluce su cuerpo desnudo por debajo.

En la quinta, sexta y séptima fotos, Jennifer entrevera un video corto de su cuenta en Instagram, donde muestra el secado de su cabello, bailando graciosamente. La secuencia advierte su look y vestimenta a través de una camisa blanca muy delgada, de seda, cubriendo su generosa anatomía.

UN DESPUÉS. Hoy Jennifer guarda medidas de bioseguridad, cuidándose de la pandemia que tiene como principal protagonista a la mortal Covid 19 que ha cobrado miles de vides en la redondez del globo. Como todos, su deseo clama días mejores para el planeta. La artista luce en dos fotografías (octava y novena), el inevitable barbijo.

A BEFORE: Jennifer Holland (Chicago, Illinois, United States, November 9, 1987) is an American film and television actress and model. She made her debut in 2004 in series such as Drake & Josh and CSI: Miami, gaining recognition when she appeared in Zombie Strippers (2008), which allowed her to make the leap to playing Ashley in American Pie Presents: The Book of Love (2009) and work in James Gunn's The Suicide Squad (2021).

Her biggest role came in 2009 when she played Ashley in the fourth part of the American Pie comedy saga, in the film American Pie Presents: The Book of Love. After several appearances in other TV series, she appeared in two episodes of the second season of American Horror Story, entitled Asylum.

In the first photo, Jennifer, in a photo shoot wearing a very low-cut black one-piece, without a bra, which she wears with her body completely naked underneath.

In the second photo, with her husband James Gunn (St. Louis, Missouri; August 5, 1966) who is an American film director, screenwriter and producer, Jennifer looks very elegant in a very low-cut, open green dress with a lot of bare skin on the torso down to the waist and no bra. She wears it with her body naked underneath.

In the third photo, Jennifer is very sensual in a very thin and very low-cut "animal print" garment, shaping her generous naked anatomy with subtle details.

In the fourth photo Holland, during the days surrounding the premiere of American Pie 7, "The Book of Love". Happy and satisfied with her role in the film, the artist smiles next to the poster and technical sheet of the film dressed in a pair of jeans and a very transparent black blouse that shows her naked body underneath.

In the fifth, sixth and seventh photos, Jennifer intervenes in a short video from her Instagram account, where she shows her blow-drying her hair, dancing gracefully. The sequence gives a glimpse of her look and outfit through a very thin white silk shirt, covering her generous anatomy.

ONE AFTER. Today Jennifer keeps biosecurity measures, guarding against the pandemic that has as its main protagonist the deadly Covid 19 that has claimed thousands of vines in the roundness of the globe. Like everyone else, her wish cries out for better days for the planet. In two photographs (eighth and ninth), the artist wears the inevitable chinstrap.